
Mircea Eliade by Ben Heine
Eternal Return - Sunn
Mircea:
"...en el Tiempo Magno
de la ontología arcaica
los símbolos, los mitos, los ritos,
la expresión precisa del ser,
la realidad antigua revelada:
un lugar en el cosmos..."
Jean-Paul by Rolando Porteño Betancourt
Jean-Paul (a través de Antoine Ronquentin):
"...jugaba a las tagüitas,
guijarro tras guijarro sobre el mar
el roce de pequeñas realidades
no muy lejos de la calle des Mutilés..."
y el vigilante acecha
con sus matemáticas lingüísticas,
su divertida tendencia a las simetrías,
sus lúdicas geometrías
mismísimo impulso de los cosmos:
{Nietzsche=el Kurtz de Coppola }
{Sartre=karma colectivo de la 2ªGuerra Mundial}
mientras la misma estatuilla Kmer
que entretenía a Antoine
ilumina una de mis neuronas
Mircea:
"...en una realidad trascendida, sacra
donde los objetos externos, tus actos
adquieren sentido, la hierofanía
de lo cotidiano, renovación del mito..."
esa doble realidad
por Sri Aurobindo experimentada
"...menok el plano celestial,
getik su terrena manifestación,
el templo como arquetipo divino..."
tu propio cuerpo receptáculo
"...tal Nidaba a Gudea,
Jehová a Moisés,
el Señor a David
entregando los planos del santuario,
tal son las constelaciones a las ciudades..."
mítica Atlantis concéntrica
"...tal Cáncer a Sippar,
la Osa Mayor a Nínive,
Arturo a Assur,
la Jerusalem celestial o
Alakamanda al palacio de Sihagiri o
la ciudad ideal de Platón a la República,
así el Caos a las zonas salvajes, desconocidas
previas a su ocupación, al conocimiento,
a la creación,
así el hombre construye,
así el hombre fabrica
desde el arquetipo..."
y el vigilante se pregunta
si el arquetipo concéntrico de la Atlántida
es el cuerpo causal de las siete esferas
(et) Jean-Paul:
"...¿Me despertaré dentro de algunos meses, dentro de algunos años, roto, decepcionado, en medio de nuevas ruinas?
Mahatma Gandhi se sienta a la sombra con "El Canto del Bienaventurado" en sus rodillas. Leyéndolo, interactuando con el verbo, halla en unos instantes la serenidad de espíritu necesaria para seguir bregando por una India independiente, la necesaria elevación de su alma. Y lee:
(et) Bhagavad Gita:
"...La perfección la alcanza cada uno cumpliendo su dharma, aunque a veces sea menos elevado que el de los demás..."
surge silenciosa respuesta
en forma de pregunta: ¿conviven
los tres tipos de conocimiento o
división del mismo Krishna
(tomad y comed todos de él)
---sáttvico, rajásico, tamásico---,
(bendita fragmentación o
expansión de la energía-materia)
en un mismo guna o
entidad natural?

"...También ellos necesitan juntarse para existir...
La mayor parte del tiempo, al no unirse a palabras, mis pensamientos quedan en la niebla..."
oh, la ,la, esa niebla,
verdadero pensar
por donde la luz,
conocimiento puro,
se filtra
Antoine Roquentin, cabizbajo,
temeroso, balbucea
"...en compensación, (por la soledad), no se pasa por alto todo lo inverosímil...; desembarazarse de la verosimilitud en el momento oportuno...no soy ni virgen ni sacerdote para jugar a la vida interior...si te miras demasiado tiempo en el espejo, verás un mono...Debí mirarme más todavía: lo que vi está por debajo del mono, en los lindes del mundo vegetal, al nivel de los pólipos..."
no me olvido de que soy animal,
cantaba Antonio Vega o
los extremos del árbol de la vida
recorridos incesantemente
como subpartículas alrededor
del átomo
R. G. Collingwood surgió en la noche. Vino a posarse silencioso en una rama, cerca de la ventana del dormitorio. En su pausado canto nocturno, insistió:
"...La historia es la disciplina del...auto-conocimiento humano [...] Conocerse a sí mismo significa conocer lo que se puede hacer, y puesto que nadie sabe lo que puede hacer hasta que lo intenta, la única pista para saber lo que puede hacer el hombre es averiguar lo que ha hecho. El valor de la historia, por consiguiente, consiste en que nos enseña lo que el hombre ha hecho y en este sentido lo que es el hombre..."
Su melódica pregunta brotaba una y otra vez de los manantiales de la noche: ¿Y cuál es tu idea de la historia? Obediente, reabrí su Idea de la Historia, pues algo rozaba concomitante con el presente mientras Antoine Roquentin se desatomizaba lentamente sobre la cama:
Jean-Paul:
"...Los que viven en sociedad han aprendido a mirarse en los espejos, tal como los ven sus amigos. Yo no tengo amigos, ¿por eso es mi carne tan desnuda? Sí, es como la naturaleza sin hombres..."
Krishna, encarnación o avatar de Vishnú, dando las margas, las vías liberadoras de la masa resultante de la fricción con el bosón de Higgs, vías complementarias, vías sucesivas, alternativas, la devoción, la acción inegoísta, el discernimiento purificado.
et Bhagavad-Gita:
"...19. Los hijos de Dhrtarashtra, al oír este horrísono clamor, que repercutía en el cielo y la tierra, sentían desgarrarse su corazón..."
Collingwood seguía en su debate, dual a pesar de él mismo, en su idea de la historia. Entre el conocimiento innato y el conocimiento histórico---nuevos revestimientos para un Platón y un Aristóteles, Descartes y la escuela inglesa con sus ilustrados seguidores...
en esa diatriba
lo abstracto, lo concreto,
la sustancia potencial y su manifestación evolucionada,
idea y verbo que se hace carne
Al guardián se le iluminaron signos
CI = CH c2 // E = mc2
donde C= Conocimiento, I = innato, H = histórico.
Al guardíán le roía un susurro: ¿Para qué?
¿No te estorba ese jueguecito mental
a la hora de disfrutar de un buen libro
por viajar gratis en el tiempoespacio
sin cansancio alguno, sin miedo?
El Tiempo en sus Manos (BSO) - Rusell García

Mircea regresó de un largo paseo entre las nubes. Musitaba:
"...el landnamá o erección de un altar de los vikingos islandeses, la transformación del caos en cosmos por el acto divino de la creación...así justificamos la colonización de los nuevos territorios (caos) en nombre de Dios, en el nombre del Rey, nuevo cosmocrátor, en el nombre de la Patria...donde caos=informe; cosmos=real(idad)/forma=sagrado=sed colectiva de Ser(=forma)..."
Collingwood coleaba en el romántico viento de un idealismo antiguo. De la mano, Schiller, Fichte, hijos de Kant, corregían a este los últimos e intransigentes coletazos del siglo de las luces. Flotando en la ventana sobre una luna menguante, Goethe, animado por ese racionalismo más calmo de sus paisanos, le confirma al bueno de Robin:
"Hoy literatura nacional no quiere decir gran cosa: está a las puertas la época de la literatura universal, y todos debemos contribuir a acelerar su llegada...die Weltliteratur..."
Rousseau, adormilado entre las nubes del fondo, sonríe fraternalmente. Súbito, despierta, y como el conejo de Alicia en el País de las Maravillas, corre, reloj en mano, mientras grita a las alimañas nocturnas:
"...Sí, sí, sí...el pueblo ilustrado, el pueblo ilustrado frente al déspota ilustrado, sí, sí, sí...Y otra vez en la plaza, los Indignados se manifiestan sin entrar al trapo del Estado Tiburón, tan ilustrado Él. Sí, sí, sí..."
I know what I like - Genesis
et Mircea:
"...arquetipo del centro = axis mundi = templo o santuario, el ejemplo de la Montaña Sagrada donde cielo y tierra se encuentran
hindúes --- Meru
uraloaltaicos --- Sumeru
iranios --- Haraberezaiti (Elburz)
budistas de Laos --- Zinnalo
vikingos --- Himingbjörg
pigmeos semang --- Batu-Ribu
Mesopotamia (Oh Bab-ilani o puerta de los dioses) --- Zigurat o Montaña
de los Países de 7 pisos
hebreos --- monte Thabor, Gerizim (omphalos)
cristianos --- Gólgota
China --- kien mu o palo enhiesto, el árbol milagroso donde se entrecruzan las tres zonas cósmicas (= cruz cristiana)
Roma --- mundus o surco que se trazaba en torno al lugar donde había de fundarse una ciudad...punto de encuentro entre las region inferiores y el mundo terrestre
Rig-Veda --- el universo crece, se expande desde un punto central (big bang) como embrión
La Caverna de los Tesoros, el libro sirio --- Adán creado en el centro del cosmos o paraíso, lugar donde luego Jesús será crucificado como "...el buey primordial mesopotámico Evagdath...el hombre primordial, Gajomard..."
La basílica, la catedral cristiana --- imago mundi o centro universal, la
Jerusalem celestial...
...El centro es pues, la zona de lo sagrado por excelencia, la de la realidad absoluta. Todos los demás símbolos de la realidad absoluta (Árbol de la Vida, Fuente de Juventud, etcétera) se hallan en él..."
lumínico, no, inmanente,
un ala del guardián
(oh watcher of the skies)
roza mi lengua:
7 centros? 7 chakras?
el centro del Ser, del Yo Soy el que Yo Soy
"el camino que lleva a centro es un camino difícil (durohana)...extravío
en el laberinto; peregrinaciones a los lugares santos; expediciones
heroicas (La Meca, El Vellocino de Oro...)..." = "rito
del paso de lo profano, efímero, a lo sagrado, inmutable, eterno,
del hombre a la divinidad..."
en el roce del crepúsculo,
al regreso del sol,
dicta de nuevo el guardián:
tal el niñ@ reproduce entre vigilia
y sueño las dinámicas
de su hogar primario,
reproduce la especie
biomecánicas moleculares,
la creación de nuevos mundos
desde un origen olvidado,
un hogar lumínico
donde toda información se contiene
atemporal
Careful. The Jester comes
with his theory of "0" or
positive-timematter / negative-voidnothing balance,
and when he thanks for it,
he is implicitly giving thanks to the no-nothing
from which even thought comes,
even if he is not concious of that.
Funny, one more Jester,
this one scientific, pure mathematical precision,
funny. Give thanks to this new idol

the practical genius,
let's welcome the machine,
long arm of human culture
reaching Alfa Centauri,
the Breakthrough Starshot Nanorobots looking for someone,
the speculative mind's paradox
or the infinite serpent, kundalini, twisting itself E=mc2 interstellar
as the endless angel spoke
setting as music Looking for Someone or Welcome to the Machine
Of course, my dear temple of plenitude, a time lapse has come with Stephen Hawking leaving Jean-Paul and Mircea silent at home, Kant avoided, Hegel shut, Schelling just adored in the long journey to Rigil Kent...
Sssh! A noise
amongst the branches,
maybe the squirrel
going up and down
with its messages
No, it's Collingwood
in the sunset walking
a path backwards
"...El positivismo puede definirse como la filosofía actuando al servicio de la ciencia natural, así como en la Edad Media la filosofía actuaba al servicio de la teología...comprobar hechos...fijar leyes...; percepción sensorial...inducción...
...Con Darwin, el punto de vista científico capitulaba ante el histórico, y ambos estaban ahora de acuerdo en concebir su materia como progresiva...La victoria de la evolución darwiniana significaba, en los círculos científicos, que la reducción positivista de la historia a la naturaleza, estaba cualificada por una reducción parcial de la naturaleza a la historia...
...el dilema bradelyano...el conocimiento es una relación entre dos cosas,...
a winged-child's laughter
seems to come from the garden
where he used to play
..., una mente y su objeto, y que lo mismo la mente no se conoce, sino que sólo se goza a sí misma. De esta suerte, todo lo que conocemos queda colocado fuera de la mente y constituye un conjunto de cosas cuyo nombre colectivo apropiado es naturaleza; a la historia, que es el conocimiento que de sí misma tiene la mente, se la califica y elimina como imposible...tradición empirista del pensamiento inglés...
Locke and Hume by its hands
...no en Locke y Hume porque la finalidad primaria de estos era enriquecer y fomentar el conocimiento que de sí misma tiene la mente; se basa en el empirismo naturalista del siglo XIX, donde (fiel a los principios del positivismo) el conocimiento significaba las ciencias naturales...A fines del siglo XIX la idea de progreso se convirtió casi en artículo de fe...una concepción de orden metafísico derivada del naturalismo evolutivo...Sin duda tenía sus raíces en el concepto dieciochesco de la historia como el progreso de la raza humana en y hacia la racionalidad; pero en el siglo XIX, la razón teórica había llegado a significar el dominio de la naturaleza (pues el conocimiento se equiparaba con las ciencias naturales, y las ciencias naturales, a los ojos del público, con la tecnología), y la razón práctica había llegado a significar la persecución del placer (pues la moralidad se equiparaba con la promoción de la felicidad del mayor número, y la felicidad con la cantidad de placer). Desde el punto de vista del siglo XIX, el progreso de la humanidad significaba hacerse más y más rico y pasarla cada vez mejor. Y la teoría evolucionista de Spencer parecía demostrar que tal progreso tiene que proseguir necesariamente, y proseguir indefinidamente..."
the child had disappeared:
two World Wars
came in a flash
with a mathematical Holocaust
El pobre Oakeshott, apabullado en el ruido, se ha sentado en mi jardín de la mano de Collingwood. Mueve los labios. ¡Sssh! Está replicando a un J. B. Bury patidifuso mientras Bradley les mira como niño en pupitre de Primaria:
"...la experiencia es un todo concreto que el análisis divide entre experimentar y lo que es experimentado; y la experiencia no es---como para ti, querido Bradley---conciencia inmediata, el simple flujo de sensaciones y sentimientos, sino que es también y siempre pensamiento, juicio, comprobación de realidad (...) mientras que la filosofía es experiencia misma, la historia, la ciencia, etc., son modos de experiencia (...) el pasado histórico no es de manera alguna pasado, es presente (...) pero no simplemente presente. También es pasado, y esta preteridad supone una modificación de su carácter como experiencia..."
había escrito el ángel
"los fragmentos son los restos de la divinidad",
qué alivio al conflicto de lo dual
volver a ver al águila
sobrevolar el jardín
de una pieza,
(el bueno de Oakeshott)
No, visitan el jardín palomas. Mirlos, abubillas, cornejas, ardillas, erizos lo cruzan inopinadamente ante la atenta mirada de mis gatos. ¡Alto! Un invitado antiguo recorre el paseo, un aedo, un peregrino que recita a los árboles leyendas medievales. Sssh, se le oye desde aquí:
La bataille est merveilluse e pesant; La batalla es prodigiosa y dura. Mult ben i fiert Oliver e Rollant, Roldán hiere sin descanso, y con él Oliveros. Li arcevesques plus de mil colps i rent, El arzobispo dio ya más de mil golpes
Li .XII. per ne s'en targent nient, y no le van en zaga los doce pares,
E li Franceis i fierent cumunement.
ni los franceses que juntos atacan. Moerent paien a miller(e)[s] e a cent; Por centenas y miles mueren los paganos. Ki ne s'en fuit de mort n'i ad guarent; Quien no se da a la fuga, no hallará luego escapatoria; Voillet o nun, tut i laisset sun tens. Quiéralo o no, dejará allí su vida. Franceis i perdent lor meillors guarnemenz;
Los francos van perdiendo su mejores puntales; Ne reverrunt lor peres ne lor parenz No volverán a ver a sus padres y parientes Ne Carlemagne, ki as porz les atent.
Ni a Carlomagno que los espera en los desfiladeros. En France en ad mult merveillus turment; En Francia se levanta una extraña tormenta;
Orez i ad de tuneire e de vent, Una tempestad cargada de truenos y de viento, Pluies e gresilz desmesureement; De lluvia y granizo, desmesuradamente;
Chiedent i fuildres e menut e suvent, Caen los rayos uno tras otro, en rápida sucesión, E terremoete ço i ad veirement. Y se estremece la tierra. De seint Michel de(l) P(aris)[eril] josqu'as Seinz
Desde San Miguel del Peligro hasta los Santos Des Besençun tresqu'as [port] de Guitsand Desde Besanzón hasta el puerto de Wissant N'en ad recet dunt del mur ne cravent. No hay una casa que no tenga las paredes resquebrajadas. Cuntre midi tenebres i ad granz; Espesas tinieblas sobrevienen en pleno mediodía; N'i ad clartet, se li ciels nen i fent. Ninguna claridad, salvo cuando se raja el cielo. Hume nel veit,ki mult ne s espaent. A todo el que lo ve, invade el espanto. Dient plusor: «Ço est li definement, Algunos dicen: "Esto es la consumación de los tiempos,
La fin del secle ki nus est en present.» ha llegado el fin del mundo!"
Il nel sevent, ne dient veir nient: Pero ellos nada saben, no son ciertas sus palabras: Ço est li granz dulors por la mort de Rollant.
Es un inmenso duelo por la muerte de Roldán.
Turoldo, monje normando, convierte una emboscada de vascones montañeses a la retaguardia carolingia en 400.000 sarracenos sufriendo para vencer la heroica resistencia de un puñado de francos. Lo más gracioso es que lo está volviendo a hacer, reescribir la Historia contando una historia, el muy chovinista, en mi jardín, capucha puesta como un fantasma camino del barranco.
et Antoine Roquentin (haciéndose el indignado):
"...comienzo a creer que no se puede probar nada. Son hipótesis honestas que explican los hechos; pero veo también que proceden de mí, que son simplemente una manera de unificar mis conocimientos (...) los hechos se acomodan en rigor al orden que yo quiero darles..."
mmm la corrosiva duda mmm
ciencia e historia probando
lo que lo improbable quiere probar
mmm desaparece la duda mmm
si estoy creando realidad
en este mismo instante
sin más ¡oh Prometeo, Prometeo¡
(la promesa del ángel)
¡cuál fue tu promesa al partir
ha ya estrellas muertas!
et on et on
the wave or the particle,
a particular wave?
Oh dear Framptom, show me the way to go through all frequencies
from pain to joy without I
El habitante de la casa había marchado, probablemente extraviado en su vuelo por los mil entretenimientos que la estupidez humana es capaz de fabricar a cada instante. Como si de un centrifugado se tratara, la mente, más calma tras habérsele concedido ver en semejante tropelía de niños alborotando con sus propios juguetes mentales, regresó a su hogar.
Place la mañana a los sentidos. Vuelven a escucharse los trinos y las ramas del bosque sonríen verdosas a su excelencia el sol. Una brisa apenas de dulce frescor acaricia las mejillas. La casa abunda en luz, se libera la mente de sus propios grilletes. En eso, el visitante inesperado.
Asomado al jardín, una figura lee en voz alta entre los gatos, que mágicos, como siempre, le miran absortos:
...En mi actividad pública perseguía la popularidad, los aplausos en el teatro, el éxito de los certámenes poéticos, la rivalidad por alcanzar una corona de heno, el montaje de espectáculos...En lo otro, deseaba vivamente purificarme de mis inmundicias, y por eso llevaba alimentos a los llamados santos y elegidos de mi secta, para que en la oficina de su estómago nos fabricasen ángeles y dioses que nos libertasen..."
Los gatos, sentados como en aula infantil, se miraban entre ellos y luego al que hablaba solo. Sin entender nada, sencillamente ronroneaban, una suerte de petición a que siguiera por aquel camino:
...(...) si esto es así, ¿dónde está el mal, por dónde se ha colado en el mundo?...¿Es que no existe el mal?...¿por qué tememos y nos preocupamos de lo que no existe?...miedo...este mismo miedo es ya un mal...y tanto más grave es este mal cuanto, no habiendo por qué temer, tememos...o es un mal de verdad lo que tememos, o ese mismo temer inmotivado es ya un mal...
Una sombra se acerca por detrás. Por Dios, si es Gérard Depardieu, el gran actor francés. Posa su mano en el hombro del aedo. Le habla en voz muy queda, un absoluto cariño. Le oigo decir desde el balcón "Gracias, Agustín", y como un niño pequeño le enseña un libreto con la imagen de un actor.
acurrucado entre sombras
'the watcher' colorea ocasos
innecesariamente, pasadas voces
de Agustín rumorean
entre las briznas de hierba
quemadas por el sol,
...¿acaso crees que te desplazas,
dónde crees podrás esconderte de ti mismo?...
polifinía de músicas y lecturas
agitándose en la conciencia
con las hierbas del atardecer
Wingsbeat - ddaluz
La otra noche se veían desde la costa los puntos flamígeros de las hogueras de San Juan en Ibiza. Quizás allí, se le escapaba al observador un juicio: ausente la masificación comercial del rito, el fuego conservara el ancestral respeto por Mama Natura que doblegaba la soberbia de sus hijos. Había ido a despedirse de Jean-Paul y Antoine, de Mircea y de Arjuna. Habían decidido hacer un charter en velero por las Islas Baleares. Antes de zarpar, celebramos nuestro pequeño festín entre los pantalanes de La Pobla de Farnals. Me decían que no me preocupara, que me habían enviado a una buena amiga que, si se lo permitía, pasearía por mi jardín musitando palabras sabias. Sólo era cuestión de que Collingwood y demás invitados la acogieran con similar simpatía.
Efectivamente. Llegó con la Luna Llena. Es más, por un instante, me pareció que era la luna misma transformándose en otro tipo de entidad. Se quedó entre los frutales y, previo aviso, musitaba a los limones en el pálido pasillo que su hermana iluminaba entre los árboles:
et Lou:
"...Cuando nos sucede algo análogo con un ser humano de carne y hueso que nos ha decepcionado, acaso, y obligado a reconsiderarlo, por el cual nos hemos sentido abandonados y traicionados, resta la posibilidad de volver a orientarnos alguna vez dentro de la misma realidad, de corregir la mirada con la cual la habíamos visto. Algo similar le sucede tarde o temprano a todo ser humano, a cualquier niño, se produce una rotura entre lo esperado y lo encontrado..."
la señora Lou Andreas Salomé
aparta los terrones del huerto;
sus manos manejan la energía
palabra tras palabra;
un niño surge a su espalda,
(¿Nietzsche?)
recoge la fruta caída
inatento a sus murmullos
Abajo, en el barranco,
lloriquea otro infante
(¿Reé?)
sin consuelo
mientras la luna, rebosante,
flota en su viaje
mecida por los pinos
El canto de Jean-Philippe Gyourmé se solapaba al de las chicharras que en la quietud del estío remitían, siempre de la mano del monje y el músico, con las tiernas sábanas que una brisa lejana traía de los cielos. Sus "Deseos para el despertar" incitaban al silencio del "...ya está, ya es, deshaz todo pensamiento, sé conmigo...". El bueno de Robin (Collingwood que no Hood) llevaba días columpiándose en la hamaca que había atado entre los pinos a la sombra de este sol tan cercano. Ha girado su cabeza en dirección a la casa en un movimiento plácido, agradecido por esa mescolanza de música y brisa en un todo. Estimulado, recita sus pensamientos a los mirlos que desde las ramas le observan como a un animal extraño:
(et Collingwood):
"...Hay otra manera en que la historia se asemeja a la ciencia: tanto en una como en otra el conocimiento es inferencial o razonado. Pero, mientras en la ciencia vive en un mundo de universales abstractos, que en un sentido están en todas partes y en otro no están en ninguna, en un sentido en todos los tiempos y en otro en ninguno, las cosas acerca de las cuales razona el historiador no son abstractas sino concretas, no universales sino individuales, no indiferentes al espacio y al tiempo sino que tienen un cuándo y un dónde propios, aunque el dónde no es necesario que sea aquí y el cuándo no pueda ser ahora (...) no es posible encajar la historia en teorías de acuerdo con las cuales el objeto del conocimiento es abstracto e inmutable, una entidad lógica ante la cual la mente puede adoptar varias actitudes..."
la monalísica sonrisa del guardíán,
la misma que la del buda cósmico,
la misma que la del sol
entre las ramas de tu jardín
tras haber muerto
y en ti resucitado
el deshacimiento de la frontera
entre la onda y la partícula,
es los círculos concéntricos
de aquel canto letánico
que en la brisa llevaran
su "onda y partícula, onda y partícula, ondapartícula..."
vidamuerteespaciotiempo
El bueno de Robin volvió a arquear las cejas levemente, como si hubiera oído a alguien parlotear por el jardín más allá del silbo de los pájaros o la respuesta de las chicharras al calor. De repente, en una esquina, agazapado, cree ver la figura de un monje medieval. Aguzando el oído escucha en una lengua ajena a la suya:
"...En acomiadar-se Fèlix del filòsof, va continuar el seu camí per una vall plena d'arbres i de fonts. A l'eixida de la vall es va topar amb dos homes de llargues barbes i llargs cabells que anaven pobrament vestits. Fèlix va saludar aquells dos homes, i ells li tornaren la salutació.
--- Bons senyors---digué fèlix---,vosaltres, ¿d'on veniu i de quin orde sou? Perquè per la vostra indumentària sembla que pertanyeu a algun orde.
--- Senyor---contestaren els dos homes---,venim de terres llunyanes i acabem de passar per un pla que hi ha prop d'ací, on hi ha un gran nombre de bèsties salvatges reunides amb la intenció d'elegir rei. Nosaltres pertanyem a l'anomenat orde del apòstols, i els nostres vestits i la nostra pobresa simbolitzen el mode de vida dels apòstols mentre van viure en aquest món..."
Caravan to Midnight - Robin Trower
Robin, extrañado pero sin menearse de su hamaca, miró a la paloma recién llegada. Esta, sin dárselas de cómplice con el inglés, le iba arrullando: "...Nicolás de Cusa, Giordano Bruno o Leibniz, incluso el gran Newton le leyó. En algún punto de la masa de pensamiento de estos detectarías su influencia si te decidieras a bucear en esos mares, diría océanos. ¿Te doy más pistas, querido Robin?". La paloma dio unos pequeños brincos en la rama. Un inmenso pichón había venido a posarse junto a ella. Carraspeó y siguió: "Con su término 'il·lustració divina', de cuando se retiró al monte de Randa, ya expresaba su consciente ánimo de síntesis, de probar la unidad del saber. Y sí, se enfrentó a los averroístas y su fractura entre razón y fe, entre ciencia y teología, empirismo y revelación que él veía como vías de acceso válidas, ambas, a una misma realidad metafísica. ¡Qué gracioso! Tiene un libro igualito al de Pio Baroja...". El pichón se encendía de colores, tanto que la paloma echó a volar.
Robin volvió a mirar hacia el rincón donde el monje leía en voz alta lo que iba escribiendo. Ahora, en torno a él, un grupo de animales de la sabana africana se tendía gozoso mientras el monje, como un coreógrafo en el último ensayo, les asignaba los papeles de una trama universal.
Hoy el jardín estaba animado. Se iba poblando de voces que en un momento dado se manifestaban en cuerpos gesticulantes, en vestidos de época, en palabras afables. Mientras el señor Ramón Llull, al que Calderón de la Barca daba palmaditas de vez en cuando como recién salido de una cárcel, organizaba su pequeña gran farándula, por el otro lado dos señores muy serios paseaban cerca de la rocalla en una especie de mutua adulación balsámica. Robin creyó reconocer a estos dos. Eran Flaubert y Turguéniev. Claro, pensó el bueno de Robin, Mircea, Jean-Paul y compañía de chárter por las Baleares y aquí que me llega el joven Ramón y otros dos maestros de los viejos mundos. Para su alivio, el francés y el ruso pasaron de largo camino del barranco. Eso sí, tan ensimismados en su charla, brazos en alto, manos blandiendo figuras retóricas como si estas hubieran tomado cuerpo delante de sus narices, tan enamorados de sus mutuos relatos que no advirtieron el bestiario que les acompasaba en su delirio con todo tipo de maullidos, graznidos, rugidos, rebuznos...
En cambio, sentados a la sombra de una de las palmeras, dos nuevos personajes parecían estar elaborando un texto. Uno dictaba al otro:
El Rey Darío daba un gran banquete a sus subordinados, los sirvientes de palacio, los hombres principales de Media y Persia, los sátrapas y los comandantes y gobernadores de su imperio en las ciento veintisiete satrapías desde la India hasta Etiopía (...) el Rey Darío se retiró a su dormitorio (...) Entonces los tres jóvenes de su guardia personal dijeron, hablando entre sí: "Nombremos, cada uno, la cosa que le parezca más fuerte; y el Rey Darío ofrecerá espléndidos regalos y premios al que exprese una opinión más cuerda (...") Uno escribió: "El vino es lo más fuerte"; el segundo escribió "El rey es lo más fuerte", el tercero escribió "Las mujeres son lo más fuerte, pero la verdad lo conquista todo" (...) El primero, el que había encomiado la fuerza del vino, empezó: "Señore", dijo, "¡y cuan cierto que el vino es lo más fuerte! Hace perder la cabeza a los que lo beben. Rey y huérfano, rico y pobre, dueño y esclavo; en todos obra el mismo efecto. Convierte todos los
pensamientos en festejo y alegría; hace que se olviden los agravios y las deudas. Hace que todos se sientan ricos; rey o sátrapa le importan poco y hace que los hombres hablen de millones. Cuando las copas se le han subido a la cabeza, uno se olvida de mostrarse amable con amigos y parientes, y por poca cosa saca la espada; y cuando se ha recobrado del vino, no recuerda lo que hizo. Señores, ¿no es el vino lo más fuerte, visto que obliga a los hombres a portarse de este modo?" Y aquí terminó.
Entonces el segundo, el que había hablado de la fuerza del rey, inició su discurso: "Señores ¿no es el hombre lo más fuerte, el hombre, diseño de la tierra y el mar y de todo lo que se encuentra en ellos? Pero, entre los hombres, el más fuerte es el rey; es el señor y dueño de los otros, y todos obeden sus mandatos. Si les ordena que combatan entre ellos, combaten; si los envía a luchar contra sus enemigos, ellos van y allanan montañas, murallas y torres. Matan y mueren; nunca desobedecen las órdenes del rey. Si consiguen la victoria, lo traen todo ante el rey, los despojos conseguidos y todo lo demás. O tomad a los que no sirven como soldados ni van a la guerra, pero trabajan el campo; siembran y siegan, y traen sus cosechas al rey. Se apremian unos a otros a traerle sus tributos. Aunque no es más que un solo hombre, si el rey les ordena que maten, matan; si les ordena que dejen en libertad, dejan; les manda que ataquen, y atacan; que asolen, y asolan; que destrocen, y destrozan; que planten, y plantan. De modo que todo su pueblo y sus tropas, le obedecen. Por otra parte, cuando se sienta a la mesa, come y bebe, y se acuesta, le rodean, prestos para servirle, y ninguno de sus sirvientes puede irse a cuidar de sus propios asuntos; nunca le desobedecen en nada. ¡Señores, para imponer tan gran obediencia, no cabe duda, el rey ha de ser lo más fuerte!" Dicho lo cual, se calló...
Esdras dejó la pluma y miró al cielo con gesto cansino. Elevó allí un gran suspiro mientras enderezaba su espalda, y desvió la mirada hacia el ánfora de vino que habían traído consigo. Nehemías le observaba comprensivo. "Anda,"---le dijo---viejo copero de Artajerjes, demuéstrame que no has olvidado tu oficio y escancia otro vaso". Nehemías, paciente, llenó ambos vasos. Alzó el suyo y brindó: "¡Por las murallas de Jerusalén, mi querido Ezra!", mientras sonreía al escribano.
Robin no tardó en captar la ironía como buen historiador. Reconoció a ambos personajes y el texto que estaban componiendo. Recordó la dispensa del emperador aqueménida para que Nehemías se encargara de reconstruir las murallas de Jerusalén en calidad de virrey, ni más ni menos, de ahí la broma de Esdras. Pero también le vinieron a la mente los versos de Ezra Pound (...llevo 5000 años aquí sentado...) al caer en la cuenta de que Ezra era la forma hebrea de Esdras. Hechas las conexiones, el bueno de Robin se descansó para seguir el dictado de Nehemías:
...El tercero, el panegerista de las mujeres y la verdad---y éste era Zorobabel---dijo: "Señores, cierto que el rey es grande, los hombres son muchos y el vino es fuerte; pero ¿quién los gobierna a todos? ¿Quién tiene el poder soberano? ¡Las mujeres, sin duda alguna! El rey y todo su pueblo, dueños de la tierra y el mar, nacieron de mujeres y de ellas proceden. Las mujeres criaron a los hombres que plantaron las viñas, las cuales producen el vino. Las mujeres confeccionan prendas para los hombres y los honran; los hombres no pueden pasarse sin mujeres. Si ellos han reunido oro, platas y toda suerte de cosas hermosas, y luego ven una mujer de bello rostro y cuerpo agraciado, dejan todo aquello para mirarla boquiabiertos, admirados, y todos los escogen a ella, antes que al oro, la plata y las demás cosas hermosas. Un hombre abandonará al padre que lo crió y educó, abandonará incluso su país, para unirse con su esposa. Y olvida a su padre, su madre y su tierra y se queda al lado de su esposa hasta el final de sus días. He ahí la prueba de que las mujeres son nuestras dueñas: ¿acaso vosotros no trabajáis y sudáis y no traéis luego lo que habéis ganado para entregarlo a vuestras esposas? El hombre sacará la espada y se lanzará al saqueo y al robo, a navegar por mares y ríos; se enfrenta a leones, viaja de noche; y cuando ha robado y saqueado trae el botín a su amada.
El hombre ama a su esposa más que a su padre y su madre. Por las mujeres, muchos hombres han perdido el seso, han sido vendidos como esclavos, han sufrido grandes pesares y han arruinado sus vidas. ¿Me creéis ahora? Ciertamente el rey está investido de gran autoridad, ningún país se atreve a levantar un dedo contra él. Sin embargo, yo le veía con Apame, su concubina favorita, hija del famoso Bartaco. Apame se sentaba a la derecha del rey, le quitaba la diadema de la cabeza y se la ponía en la suya propia, y con la mano izquierda le daba un cachete al rey; y el rey se quedaba contemplándola boquiabierto. Cuando se le reía en sus propias barbas, él también reía; cuando se le enfadaba, él la mimaba para corregirla. Señores, si las mujeres son capaces de todo esto, ¿cómo negaremos su fuerza?" El rey y los principales del reino se miraron unos a otros.
El joven prosiguió, para referirse a la verdad: "Señores, hemos visto que las mujeres son fuertes. La tierra es inmensa, el firmamento está muy alto, el sol corre veloz en su carrera, pues completa el círculo del firmamento y regresa al hogar en un solo día. ¡Qué grande el autor de todas estas cosas! Pero también la verdad es grande, y es más fuerte que todo el resto. La tierra entera invoca a la verdad, el cielo la ensalza. Todas las cosas creadas se estremecen y tiemblan; si hay verdad, no hay injusticia. Hay injusticia en el vino, en los reyes, en las mujeres, en todos los hombres y en todas sus obras, y podríamos seguir enumerando. Pero la verdad permanece y es fuerte eternamente; vive y gobierna por los siglos de los siglos. En ella no hay favoritismo ni parcialidad; prefiere obrar con justicia antes que injusta y maliciosamente. Todos aprueban sus obras; la injusticia no se filtra en sus juicios. Suyas son la fuerza y la realeza, la autoridad y la majestad de todos los tiempos. ¡Bendito sea el Dios de la verdad!"
Así terminó su discurso (...) Entonces el Rey le dijo: "Pide lo que quieras, aunque no esté escrito ahí, te lo concederé. Pues has demostrado ser el más sabio; y te sentarás a mi vera y serás llamado Pariente mío".
Entonces el joven le dijo al Rey: "Recuerda la promesa que hiciste el día que subiste al trono. Prometiste reconstruir Jerusalén y devolver los vasos que se llevaron de allí y Ciro guardó aparte"(...)
El Rey Darío se levantó y le besó, y le escribió cartas para todos los tesoreros, gobernadores, comandantes y sátrapas, ordenándoles que dieran salvoconductos al joven y a todos los que fueran con él a reconstruir Jerusalén. A los gobernadores de Celesiria y Fenicia y del Líbano les escribió cartas mandándoles que transportaran madera de cedro del Libano y ayudasen a Zorobabel a reconstruir la ciudad. A todos los judíos que salieran del reino para dirigirse a Judea les dio cartas garantizándoles sus libertades (...)
Al salir, el joven Zorobabel se volvió hacia Jerusalén, levantó la mirada y alabó al Rey de los cielos. "De ti viene la victoria", dijo, "de ti viene la sabiduría: tuya es la gloria y yo soy tu siervo. Loor a ti que me diste sabiduría, a ti te doy las gracias, oh Señor de nuestros padres."
Cogió las cartas y se dirigió a Babilonia, donde explicó lo sucedido a sus compatriotas judíos. Todos alabaron al Dios de sus padres por haberles dado plena libertad para ir a reconstruir Jerusalén y el templo que llevaba su santo nombre, celebrándolo durante una semana con música y festejos (...)
Nehemías y Esdras brindaron de nuevo, y siguieron brindando hasta bien entrada la noche. Robin, que se había mantenido a cierta distancia por una discreción que al tiempo le permitiera seguir el relato, se alejó meditativo entre los velos lunares. Pudo ver, como en un sueño, la figura del escriba y la del copero desvaneciéndose sobre el telar lechoso y transparente para reaparecer, translúcidos en ese viaje estelar, frente a unas murallas que se alzaban justo detrás de la Luna. Y allá se fundieron con la oscuridad. Si acaso el tintineo de una estrella no muy lejana.
Su melódica pregunta brotaba una y otra vez de los manantiales de la noche: ¿Y cuál es tu idea de la historia? Obediente, reabrí su Idea de la Historia, pues algo rozaba concomitante con el presente mientras Antoine Roquentin se desatomizaba lentamente sobre la cama:
"...El hombre ya no se siente dueño de su destino en el sentido de que el éxito o el fracaso de sus empresas dependen de su inteligencia; su destino se le impone, y la libertad de su voluntad se muestra no ya en la forma en que gobierna los acontecimientos exteriores de su vida, sino en el gobierno del ánimo interior con que se enfrenta a ellos. Polibio aplica a la historia las mismas nociones helenísticas que aplicaron los estoicos y epicúreos a la ética...Y es que para la mente helenística la conciencia de sí mismo ya no es, como para la mente helénica, una potencia conquistadora del mundo; es una ciudadela que ofrece un asilo seguro contra un mundo a la vez hostil y huraño..."
Y el pobre Antoine, en su nauseabunda deconstrucción, átomo a átomo, la mano en la barbilla, mira al búho colosal en su rama como un busto parlante de la Atenea más rígida, oye desinteresado su rítmica voz lunar.
El vigilante adereza esa onda,
la sintetiza al par mínimo
juventud-vejez sin olvidar
la transición entre los extremos,
individuo-grupo en una sola conciencia
que el individuo cree propia,
y la adorna, la destroza,
la vuelve patas arriba,
regurgita una y otra vez,
en esa onda, una esencia
renovada, re-formada
Jean-Paul:
"...Los que viven en sociedad han aprendido a mirarse en los espejos, tal como los ven sus amigos. Yo no tengo amigos, ¿por eso es mi carne tan desnuda? Sí, es como la naturaleza sin hombres..."
Krishna, encarnación o avatar de Vishnú, dando las margas, las vías liberadoras de la masa resultante de la fricción con el bosón de Higgs, vías complementarias, vías sucesivas, alternativas, la devoción, la acción inegoísta, el discernimiento purificado.
et Bhagavad-Gita:
"...19. Los hijos de Dhrtarashtra, al oír este horrísono clamor, que repercutía en el cielo y la tierra, sentían desgarrarse su corazón..."
Collingwood seguía en su debate, dual a pesar de él mismo, en su idea de la historia. Entre el conocimiento innato y el conocimiento histórico---nuevos revestimientos para un Platón y un Aristóteles, Descartes y la escuela inglesa con sus ilustrados seguidores...
en esa diatriba
lo abstracto, lo concreto,
la sustancia potencial y su manifestación evolucionada,
idea y verbo que se hace carne
Al guardián se le iluminaron signos
CI = CH c2 // E = mc2
donde C= Conocimiento, I = innato, H = histórico.
Al guardíán le roía un susurro: ¿Para qué?
¿No te estorba ese jueguecito mental
a la hora de disfrutar de un buen libro
por viajar gratis en el tiempoespacio
sin cansancio alguno, sin miedo?
El Tiempo en sus Manos (BSO) - Rusell García

Mircea regresó de un largo paseo entre las nubes. Musitaba:
"...el landnamá o erección de un altar de los vikingos islandeses, la transformación del caos en cosmos por el acto divino de la creación...así justificamos la colonización de los nuevos territorios (caos) en nombre de Dios, en el nombre del Rey, nuevo cosmocrátor, en el nombre de la Patria...donde caos=informe; cosmos=real(idad)/forma=sagrado=sed colectiva de Ser(=forma)..."
Ante lo cual, Roquentin no pudo contenerse:
"...el tiempo es demasiado ancho, no se deja llenar. Todo lo que uno sumerge en él se ablanda y se estira..."
et Bhagavad:
"...11. ...el hombre iluminado no se entristece ni por los vivos ni por los muertos...", y enfrascado como estaba el Bienaventurado, eructó un número más desde aquel caos sin orden: "...14. ¡Oh, Bharata, hijo de Kunti!, soporta los estados corpóreos que producen el frío y el calor, el placer y el dolor, cosas todas perecederas...", al que venía enganchado el 15.: "...tranquilo en el placer y en el dolor...la inmortalidad"
Collingwood coleaba en el romántico viento de un idealismo antiguo. De la mano, Schiller, Fichte, hijos de Kant, corregían a este los últimos e intransigentes coletazos del siglo de las luces. Flotando en la ventana sobre una luna menguante, Goethe, animado por ese racionalismo más calmo de sus paisanos, le confirma al bueno de Robin:
"Hoy literatura nacional no quiere decir gran cosa: está a las puertas la época de la literatura universal, y todos debemos contribuir a acelerar su llegada...die Weltliteratur..."
Rousseau, adormilado entre las nubes del fondo, sonríe fraternalmente. Súbito, despierta, y como el conejo de Alicia en el País de las Maravillas, corre, reloj en mano, mientras grita a las alimañas nocturnas:
"...Sí, sí, sí...el pueblo ilustrado, el pueblo ilustrado frente al déspota ilustrado, sí, sí, sí...Y otra vez en la plaza, los Indignados se manifiestan sin entrar al trapo del Estado Tiburón, tan ilustrado Él. Sí, sí, sí..."
I know what I like - Genesis
et Mircea:
"...arquetipo del centro = axis mundi = templo o santuario, el ejemplo de la Montaña Sagrada donde cielo y tierra se encuentran
hindúes --- Meru
uraloaltaicos --- Sumeru
iranios --- Haraberezaiti (Elburz)
budistas de Laos --- Zinnalo
vikingos --- Himingbjörg
pigmeos semang --- Batu-Ribu
Mesopotamia (Oh Bab-ilani o puerta de los dioses) --- Zigurat o Montaña
de los Países de 7 pisos
hebreos --- monte Thabor, Gerizim (omphalos)
cristianos --- Gólgota
China --- kien mu o palo enhiesto, el árbol milagroso donde se entrecruzan las tres zonas cósmicas (= cruz cristiana)
Roma --- mundus o surco que se trazaba en torno al lugar donde había de fundarse una ciudad...punto de encuentro entre las region inferiores y el mundo terrestre
Rig-Veda --- el universo crece, se expande desde un punto central (big bang) como embrión
La Caverna de los Tesoros, el libro sirio --- Adán creado en el centro del cosmos o paraíso, lugar donde luego Jesús será crucificado como "...el buey primordial mesopotámico Evagdath...el hombre primordial, Gajomard..."
La basílica, la catedral cristiana --- imago mundi o centro universal, la
Jerusalem celestial...
...El centro es pues, la zona de lo sagrado por excelencia, la de la realidad absoluta. Todos los demás símbolos de la realidad absoluta (Árbol de la Vida, Fuente de Juventud, etcétera) se hallan en él..."
lumínico, no, inmanente,
un ala del guardián
(oh watcher of the skies)
roza mi lengua:
7 centros? 7 chakras?
el centro del Ser, del Yo Soy el que Yo Soy
"el camino que lleva a centro es un camino difícil (durohana)...extravío
en el laberinto; peregrinaciones a los lugares santos; expediciones
heroicas (La Meca, El Vellocino de Oro...)..." = "rito
del paso de lo profano, efímero, a lo sagrado, inmutable, eterno,
del hombre a la divinidad..."
et Roquentin, en un hastiazgo:
"...soy feliz...este frío es tan puro, tan pura la noche; ¿no soy yo mismo una onda de aire helado? No tener ni sangre, ni linfa, ni carne. Deslizarse por este largo canal hacia aquella palidez. Ser sólo frío..."
hasta que la onda
se hace partícula,
una vez más, incesante
yingyang
Collingwood se ha pasado la noche dialogando con Schelling. A pesar del esfuerzo, recreativo, eso sí, siempre lúdico-cultural, a pesar del inmenso respeto y cariño con que el británico se acerca al germano en su afán por destilar el saber de los románticos e ilustrados maestros anteriores, no conseguimos sacar adelante la oportuna frase que lo sintetizara con ese poder único de la poesía de suprimir toda anécdota y todo ego parlanchín, neurótico, por abrir a orillas de un mar celeste la pequeña, grande, mediana---indistinta la cantidad---ostra de donde la diosa renace esplendorosa o una sencilla perla blanca irradia su luz calma...Aún si fuera el más breve de los instantes por donde, una vez más, brecha invisible, lo inmutable, lo eterno, asoma incognoscible, indescriptible...
La cuestión es que Hegel empieza a tocar a la puerta en un gesto de respeto que le honra. Collingwood y Schelling, todavía conversando entre las ramas nocturnas con un cariño fraternal, no llegaban a un entente más definitivo que permitiera al alemán volver a sus bibliotecas celestiales. La dialéctica entre naturaleza y mente, a pesar de ellos, por ellos, y con ellos, seguía creciendo corpus.
lo que al individuo
a la especie
en espiral de fractales,
tuvo el guardián la visión
con el trino
de una primavera amanecida
Tal vino
habría de esfumarse,
desvanecido chispazo,
su inaprehensible humo
¿qué me dijo su voz certera?
Vuela ahora entre las nubes
que se forman al fondo
La cuestión es que Hegel empieza a tocar a la puerta en un gesto de respeto que le honra. Collingwood y Schelling, todavía conversando entre las ramas nocturnas con un cariño fraternal, no llegaban a un entente más definitivo que permitiera al alemán volver a sus bibliotecas celestiales. La dialéctica entre naturaleza y mente, a pesar de ellos, por ellos, y con ellos, seguía creciendo corpus.
lo que al individuo
a la especie
en espiral de fractales,
tuvo el guardián la visión
con el trino
de una primavera amanecida
Tal vino
habría de esfumarse,
desvanecido chispazo,
su inaprehensible humo
¿qué me dijo su voz certera?
Vuela ahora entre las nubes
que se forman al fondo
en el roce del crepúsculo,
al regreso del sol,
dicta de nuevo el guardián:
tal el niñ@ reproduce entre vigilia
y sueño las dinámicas
de su hogar primario,
reproduce la especie
biomecánicas moleculares,
la creación de nuevos mundos
desde un origen olvidado,
un hogar lumínico
donde toda información se contiene
atemporal
"...después del invierno que sobrevino a la muerte de Hegel...", continuaba Collingwood musitando a la pétrea luz que pálida asomaba entre los árboles. Se había hecho silencio entorno al gran filósofo alemán. The Presuppositions of Critical History revoloteaba sus hojas decimonónicas en la noche. F. H. Bradley refrescaba el aire con novedosos vuelos. Collingwood les daba voz: "...la realidad no solamente es experiencia, es experiencia inmediata, tiene la inmediatez de la sensación. Pero el pensar divide, distingue, mediatiza; por tanto, justo en la medida en que pensamos acerca de la realidad la deformamos y destruimos su inmediatez, y así el pensamiento no puede capturarla nunca. Vivimos la realidad en el flujo inmediato de nuestra vida mental, pero al pensar cesamos de vivirla, porque deja de ser inmediata; la fragmentamos en partes distintas, y esta fragmentación destruye su inmediatez, y por lo tanto, se destruye a sí misma..."
tintinea un libro,
solapas, cubiertas, portada
de un Discurso Fragmentario
con una luz fueguina
a punto de arder el libro,
recuerdo y predicción
de una espiral creciente:
Michael B. Oakeshott se personifica...
with his theory of "0" or
positive-timematter / negative-voidnothing balance,
and when he thanks for it,
he is implicitly giving thanks to the no-nothing
from which even thought comes,
even if he is not concious of that.
Funny, one more Jester,
this one scientific, pure mathematical precision,
funny. Give thanks to this new idol

the practical genius,
let's welcome the machine,
long arm of human culture
reaching Alfa Centauri,
the Breakthrough Starshot Nanorobots looking for someone,
the speculative mind's paradox
or the infinite serpent, kundalini, twisting itself E=mc2 interstellar
as the endless angel spoke
setting as music Looking for Someone or Welcome to the Machine
Of course, my dear temple of plenitude, a time lapse has come with Stephen Hawking leaving Jean-Paul and Mircea silent at home, Kant avoided, Hegel shut, Schelling just adored in the long journey to Rigil Kent...
Sssh! A noise
amongst the branches,
maybe the squirrel
going up and down
with its messages
No, it's Collingwood
in the sunset walking
a path backwards
"...El positivismo puede definirse como la filosofía actuando al servicio de la ciencia natural, así como en la Edad Media la filosofía actuaba al servicio de la teología...comprobar hechos...fijar leyes...; percepción sensorial...inducción...
...Con Darwin, el punto de vista científico capitulaba ante el histórico, y ambos estaban ahora de acuerdo en concebir su materia como progresiva...La victoria de la evolución darwiniana significaba, en los círculos científicos, que la reducción positivista de la historia a la naturaleza, estaba cualificada por una reducción parcial de la naturaleza a la historia...
...el dilema bradelyano...el conocimiento es una relación entre dos cosas,...
a winged-child's laughter
seems to come from the garden
where he used to play
..., una mente y su objeto, y que lo mismo la mente no se conoce, sino que sólo se goza a sí misma. De esta suerte, todo lo que conocemos queda colocado fuera de la mente y constituye un conjunto de cosas cuyo nombre colectivo apropiado es naturaleza; a la historia, que es el conocimiento que de sí misma tiene la mente, se la califica y elimina como imposible...tradición empirista del pensamiento inglés...
Locke and Hume by its hands
...no en Locke y Hume porque la finalidad primaria de estos era enriquecer y fomentar el conocimiento que de sí misma tiene la mente; se basa en el empirismo naturalista del siglo XIX, donde (fiel a los principios del positivismo) el conocimiento significaba las ciencias naturales...A fines del siglo XIX la idea de progreso se convirtió casi en artículo de fe...una concepción de orden metafísico derivada del naturalismo evolutivo...Sin duda tenía sus raíces en el concepto dieciochesco de la historia como el progreso de la raza humana en y hacia la racionalidad; pero en el siglo XIX, la razón teórica había llegado a significar el dominio de la naturaleza (pues el conocimiento se equiparaba con las ciencias naturales, y las ciencias naturales, a los ojos del público, con la tecnología), y la razón práctica había llegado a significar la persecución del placer (pues la moralidad se equiparaba con la promoción de la felicidad del mayor número, y la felicidad con la cantidad de placer). Desde el punto de vista del siglo XIX, el progreso de la humanidad significaba hacerse más y más rico y pasarla cada vez mejor. Y la teoría evolucionista de Spencer parecía demostrar que tal progreso tiene que proseguir necesariamente, y proseguir indefinidamente..."
the child had disappeared:
two World Wars
came in a flash
with a mathematical Holocaust
El pobre Oakeshott, apabullado en el ruido, se ha sentado en mi jardín de la mano de Collingwood. Mueve los labios. ¡Sssh! Está replicando a un J. B. Bury patidifuso mientras Bradley les mira como niño en pupitre de Primaria:
"...la experiencia es un todo concreto que el análisis divide entre experimentar y lo que es experimentado; y la experiencia no es---como para ti, querido Bradley---conciencia inmediata, el simple flujo de sensaciones y sentimientos, sino que es también y siempre pensamiento, juicio, comprobación de realidad (...) mientras que la filosofía es experiencia misma, la historia, la ciencia, etc., son modos de experiencia (...) el pasado histórico no es de manera alguna pasado, es presente (...) pero no simplemente presente. También es pasado, y esta preteridad supone una modificación de su carácter como experiencia..."
había escrito el ángel
"los fragmentos son los restos de la divinidad",
qué alivio al conflicto de lo dual
volver a ver al águila
sobrevolar el jardín
de una pieza,
(el bueno de Oakeshott)
La bataille est merveilluse e pesant; La batalla es prodigiosa y dura. Mult ben i fiert Oliver e Rollant, Roldán hiere sin descanso, y con él Oliveros. Li arcevesques plus de mil colps i rent, El arzobispo dio ya más de mil golpes
Li .XII. per ne s'en targent nient, y no le van en zaga los doce pares,
E li Franceis i fierent cumunement.
ni los franceses que juntos atacan. Moerent paien a miller(e)[s] e a cent; Por centenas y miles mueren los paganos. Ki ne s'en fuit de mort n'i ad guarent; Quien no se da a la fuga, no hallará luego escapatoria; Voillet o nun, tut i laisset sun tens. Quiéralo o no, dejará allí su vida. Franceis i perdent lor meillors guarnemenz;
Los francos van perdiendo su mejores puntales; Ne reverrunt lor peres ne lor parenz No volverán a ver a sus padres y parientes Ne Carlemagne, ki as porz les atent.
Ni a Carlomagno que los espera en los desfiladeros. En France en ad mult merveillus turment; En Francia se levanta una extraña tormenta;
Orez i ad de tuneire e de vent, Una tempestad cargada de truenos y de viento, Pluies e gresilz desmesureement; De lluvia y granizo, desmesuradamente;
Chiedent i fuildres e menut e suvent, Caen los rayos uno tras otro, en rápida sucesión, E terremoete ço i ad veirement. Y se estremece la tierra. De seint Michel de(l) P(aris)[eril] josqu'as Seinz
Desde San Miguel del Peligro hasta los Santos Des Besençun tresqu'as [port] de Guitsand Desde Besanzón hasta el puerto de Wissant N'en ad recet dunt del mur ne cravent. No hay una casa que no tenga las paredes resquebrajadas. Cuntre midi tenebres i ad granz; Espesas tinieblas sobrevienen en pleno mediodía; N'i ad clartet, se li ciels nen i fent. Ninguna claridad, salvo cuando se raja el cielo. Hume nel veit,ki mult ne s espaent. A todo el que lo ve, invade el espanto. Dient plusor: «Ço est li definement, Algunos dicen: "Esto es la consumación de los tiempos,
La fin del secle ki nus est en present.» ha llegado el fin del mundo!"
Il nel sevent, ne dient veir nient: Pero ellos nada saben, no son ciertas sus palabras: Ço est li granz dulors por la mort de Rollant.
Es un inmenso duelo por la muerte de Roldán.
Turoldo, monje normando, convierte una emboscada de vascones montañeses a la retaguardia carolingia en 400.000 sarracenos sufriendo para vencer la heroica resistencia de un puñado de francos. Lo más gracioso es que lo está volviendo a hacer, reescribir la Historia contando una historia, el muy chovinista, en mi jardín, capucha puesta como un fantasma camino del barranco.
et Antoine Roquentin (haciéndose el indignado):
"...comienzo a creer que no se puede probar nada. Son hipótesis honestas que explican los hechos; pero veo también que proceden de mí, que son simplemente una manera de unificar mis conocimientos (...) los hechos se acomodan en rigor al orden que yo quiero darles..."
mmm la corrosiva duda mmm
ciencia e historia probando
lo que lo improbable quiere probar
mmm desaparece la duda mmm
si estoy creando realidad
en este mismo instante
sin más ¡oh Prometeo, Prometeo¡
(la promesa del ángel)
¡cuál fue tu promesa al partir
ha ya estrellas muertas!
et on et on
the wave or the particle,
a particular wave?
Oh dear Framptom, show me the way to go through all frequencies
from pain to joy without I
El habitante de la casa había marchado, probablemente extraviado en su vuelo por los mil entretenimientos que la estupidez humana es capaz de fabricar a cada instante. Como si de un centrifugado se tratara, la mente, más calma tras habérsele concedido ver en semejante tropelía de niños alborotando con sus propios juguetes mentales, regresó a su hogar.
Place la mañana a los sentidos. Vuelven a escucharse los trinos y las ramas del bosque sonríen verdosas a su excelencia el sol. Una brisa apenas de dulce frescor acaricia las mejillas. La casa abunda en luz, se libera la mente de sus propios grilletes. En eso, el visitante inesperado.
Asomado al jardín, una figura lee en voz alta entre los gatos, que mágicos, como siempre, le miran absortos:
...En mi actividad pública perseguía la popularidad, los aplausos en el teatro, el éxito de los certámenes poéticos, la rivalidad por alcanzar una corona de heno, el montaje de espectáculos...En lo otro, deseaba vivamente purificarme de mis inmundicias, y por eso llevaba alimentos a los llamados santos y elegidos de mi secta, para que en la oficina de su estómago nos fabricasen ángeles y dioses que nos libertasen..."
Los gatos, sentados como en aula infantil, se miraban entre ellos y luego al que hablaba solo. Sin entender nada, sencillamente ronroneaban, una suerte de petición a que siguiera por aquel camino:
...(...) si esto es así, ¿dónde está el mal, por dónde se ha colado en el mundo?...¿Es que no existe el mal?...¿por qué tememos y nos preocupamos de lo que no existe?...miedo...este mismo miedo es ya un mal...y tanto más grave es este mal cuanto, no habiendo por qué temer, tememos...o es un mal de verdad lo que tememos, o ese mismo temer inmotivado es ya un mal...
Una sombra se acerca por detrás. Por Dios, si es Gérard Depardieu, el gran actor francés. Posa su mano en el hombro del aedo. Le habla en voz muy queda, un absoluto cariño. Le oigo decir desde el balcón "Gracias, Agustín", y como un niño pequeño le enseña un libreto con la imagen de un actor.
acurrucado entre sombras
'the watcher' colorea ocasos
innecesariamente, pasadas voces
de Agustín rumorean
entre las briznas de hierba
quemadas por el sol,
...¿acaso crees que te desplazas,
dónde crees podrás esconderte de ti mismo?...
polifinía de músicas y lecturas
agitándose en la conciencia
con las hierbas del atardecer
Wingsbeat - ddaluz
La otra noche se veían desde la costa los puntos flamígeros de las hogueras de San Juan en Ibiza. Quizás allí, se le escapaba al observador un juicio: ausente la masificación comercial del rito, el fuego conservara el ancestral respeto por Mama Natura que doblegaba la soberbia de sus hijos. Había ido a despedirse de Jean-Paul y Antoine, de Mircea y de Arjuna. Habían decidido hacer un charter en velero por las Islas Baleares. Antes de zarpar, celebramos nuestro pequeño festín entre los pantalanes de La Pobla de Farnals. Me decían que no me preocupara, que me habían enviado a una buena amiga que, si se lo permitía, pasearía por mi jardín musitando palabras sabias. Sólo era cuestión de que Collingwood y demás invitados la acogieran con similar simpatía.
Efectivamente. Llegó con la Luna Llena. Es más, por un instante, me pareció que era la luna misma transformándose en otro tipo de entidad. Se quedó entre los frutales y, previo aviso, musitaba a los limones en el pálido pasillo que su hermana iluminaba entre los árboles:
et Lou:
"...Cuando nos sucede algo análogo con un ser humano de carne y hueso que nos ha decepcionado, acaso, y obligado a reconsiderarlo, por el cual nos hemos sentido abandonados y traicionados, resta la posibilidad de volver a orientarnos alguna vez dentro de la misma realidad, de corregir la mirada con la cual la habíamos visto. Algo similar le sucede tarde o temprano a todo ser humano, a cualquier niño, se produce una rotura entre lo esperado y lo encontrado..."
la señora Lou Andreas Salomé
aparta los terrones del huerto;
sus manos manejan la energía
palabra tras palabra;
un niño surge a su espalda,
(¿Nietzsche?)
recoge la fruta caída
inatento a sus murmullos
Abajo, en el barranco,
lloriquea otro infante
(¿Reé?)
sin consuelo
mientras la luna, rebosante,
flota en su viaje
mecida por los pinos
El canto de Jean-Philippe Gyourmé se solapaba al de las chicharras que en la quietud del estío remitían, siempre de la mano del monje y el músico, con las tiernas sábanas que una brisa lejana traía de los cielos. Sus "Deseos para el despertar" incitaban al silencio del "...ya está, ya es, deshaz todo pensamiento, sé conmigo...". El bueno de Robin (Collingwood que no Hood) llevaba días columpiándose en la hamaca que había atado entre los pinos a la sombra de este sol tan cercano. Ha girado su cabeza en dirección a la casa en un movimiento plácido, agradecido por esa mescolanza de música y brisa en un todo. Estimulado, recita sus pensamientos a los mirlos que desde las ramas le observan como a un animal extraño:
(et Collingwood):
"...Hay otra manera en que la historia se asemeja a la ciencia: tanto en una como en otra el conocimiento es inferencial o razonado. Pero, mientras en la ciencia vive en un mundo de universales abstractos, que en un sentido están en todas partes y en otro no están en ninguna, en un sentido en todos los tiempos y en otro en ninguno, las cosas acerca de las cuales razona el historiador no son abstractas sino concretas, no universales sino individuales, no indiferentes al espacio y al tiempo sino que tienen un cuándo y un dónde propios, aunque el dónde no es necesario que sea aquí y el cuándo no pueda ser ahora (...) no es posible encajar la historia en teorías de acuerdo con las cuales el objeto del conocimiento es abstracto e inmutable, una entidad lógica ante la cual la mente puede adoptar varias actitudes..."
la monalísica sonrisa del guardíán,
la misma que la del buda cósmico,
la misma que la del sol
entre las ramas de tu jardín
tras haber muerto
y en ti resucitado
el deshacimiento de la frontera
entre la onda y la partícula,
es los círculos concéntricos
de aquel canto letánico
que en la brisa llevaran
su "onda y partícula, onda y partícula, ondapartícula..."
vidamuerteespaciotiempo
El bueno de Robin volvió a arquear las cejas levemente, como si hubiera oído a alguien parlotear por el jardín más allá del silbo de los pájaros o la respuesta de las chicharras al calor. De repente, en una esquina, agazapado, cree ver la figura de un monje medieval. Aguzando el oído escucha en una lengua ajena a la suya:
"...En acomiadar-se Fèlix del filòsof, va continuar el seu camí per una vall plena d'arbres i de fonts. A l'eixida de la vall es va topar amb dos homes de llargues barbes i llargs cabells que anaven pobrament vestits. Fèlix va saludar aquells dos homes, i ells li tornaren la salutació.
--- Bons senyors---digué fèlix---,vosaltres, ¿d'on veniu i de quin orde sou? Perquè per la vostra indumentària sembla que pertanyeu a algun orde.
--- Senyor---contestaren els dos homes---,venim de terres llunyanes i acabem de passar per un pla que hi ha prop d'ací, on hi ha un gran nombre de bèsties salvatges reunides amb la intenció d'elegir rei. Nosaltres pertanyem a l'anomenat orde del apòstols, i els nostres vestits i la nostra pobresa simbolitzen el mode de vida dels apòstols mentre van viure en aquest món..."
Caravan to Midnight - Robin Trower
Robin, extrañado pero sin menearse de su hamaca, miró a la paloma recién llegada. Esta, sin dárselas de cómplice con el inglés, le iba arrullando: "...Nicolás de Cusa, Giordano Bruno o Leibniz, incluso el gran Newton le leyó. En algún punto de la masa de pensamiento de estos detectarías su influencia si te decidieras a bucear en esos mares, diría océanos. ¿Te doy más pistas, querido Robin?". La paloma dio unos pequeños brincos en la rama. Un inmenso pichón había venido a posarse junto a ella. Carraspeó y siguió: "Con su término 'il·lustració divina', de cuando se retiró al monte de Randa, ya expresaba su consciente ánimo de síntesis, de probar la unidad del saber. Y sí, se enfrentó a los averroístas y su fractura entre razón y fe, entre ciencia y teología, empirismo y revelación que él veía como vías de acceso válidas, ambas, a una misma realidad metafísica. ¡Qué gracioso! Tiene un libro igualito al de Pio Baroja...". El pichón se encendía de colores, tanto que la paloma echó a volar.
Robin volvió a mirar hacia el rincón donde el monje leía en voz alta lo que iba escribiendo. Ahora, en torno a él, un grupo de animales de la sabana africana se tendía gozoso mientras el monje, como un coreógrafo en el último ensayo, les asignaba los papeles de una trama universal.
Hoy el jardín estaba animado. Se iba poblando de voces que en un momento dado se manifestaban en cuerpos gesticulantes, en vestidos de época, en palabras afables. Mientras el señor Ramón Llull, al que Calderón de la Barca daba palmaditas de vez en cuando como recién salido de una cárcel, organizaba su pequeña gran farándula, por el otro lado dos señores muy serios paseaban cerca de la rocalla en una especie de mutua adulación balsámica. Robin creyó reconocer a estos dos. Eran Flaubert y Turguéniev. Claro, pensó el bueno de Robin, Mircea, Jean-Paul y compañía de chárter por las Baleares y aquí que me llega el joven Ramón y otros dos maestros de los viejos mundos. Para su alivio, el francés y el ruso pasaron de largo camino del barranco. Eso sí, tan ensimismados en su charla, brazos en alto, manos blandiendo figuras retóricas como si estas hubieran tomado cuerpo delante de sus narices, tan enamorados de sus mutuos relatos que no advirtieron el bestiario que les acompasaba en su delirio con todo tipo de maullidos, graznidos, rugidos, rebuznos...
En cambio, sentados a la sombra de una de las palmeras, dos nuevos personajes parecían estar elaborando un texto. Uno dictaba al otro:
El Rey Darío daba un gran banquete a sus subordinados, los sirvientes de palacio, los hombres principales de Media y Persia, los sátrapas y los comandantes y gobernadores de su imperio en las ciento veintisiete satrapías desde la India hasta Etiopía (...) el Rey Darío se retiró a su dormitorio (...) Entonces los tres jóvenes de su guardia personal dijeron, hablando entre sí: "Nombremos, cada uno, la cosa que le parezca más fuerte; y el Rey Darío ofrecerá espléndidos regalos y premios al que exprese una opinión más cuerda (...") Uno escribió: "El vino es lo más fuerte"; el segundo escribió "El rey es lo más fuerte", el tercero escribió "Las mujeres son lo más fuerte, pero la verdad lo conquista todo" (...) El primero, el que había encomiado la fuerza del vino, empezó: "Señore", dijo, "¡y cuan cierto que el vino es lo más fuerte! Hace perder la cabeza a los que lo beben. Rey y huérfano, rico y pobre, dueño y esclavo; en todos obra el mismo efecto. Convierte todos los
Entonces el segundo, el que había hablado de la fuerza del rey, inició su discurso: "Señores ¿no es el hombre lo más fuerte, el hombre, diseño de la tierra y el mar y de todo lo que se encuentra en ellos? Pero, entre los hombres, el más fuerte es el rey; es el señor y dueño de los otros, y todos obeden sus mandatos. Si les ordena que combatan entre ellos, combaten; si los envía a luchar contra sus enemigos, ellos van y allanan montañas, murallas y torres. Matan y mueren; nunca desobedecen las órdenes del rey. Si consiguen la victoria, lo traen todo ante el rey, los despojos conseguidos y todo lo demás. O tomad a los que no sirven como soldados ni van a la guerra, pero trabajan el campo; siembran y siegan, y traen sus cosechas al rey. Se apremian unos a otros a traerle sus tributos. Aunque no es más que un solo hombre, si el rey les ordena que maten, matan; si les ordena que dejen en libertad, dejan; les manda que ataquen, y atacan; que asolen, y asolan; que destrocen, y destrozan; que planten, y plantan. De modo que todo su pueblo y sus tropas, le obedecen. Por otra parte, cuando se sienta a la mesa, come y bebe, y se acuesta, le rodean, prestos para servirle, y ninguno de sus sirvientes puede irse a cuidar de sus propios asuntos; nunca le desobedecen en nada. ¡Señores, para imponer tan gran obediencia, no cabe duda, el rey ha de ser lo más fuerte!" Dicho lo cual, se calló...
Esdras dejó la pluma y miró al cielo con gesto cansino. Elevó allí un gran suspiro mientras enderezaba su espalda, y desvió la mirada hacia el ánfora de vino que habían traído consigo. Nehemías le observaba comprensivo. "Anda,"---le dijo---viejo copero de Artajerjes, demuéstrame que no has olvidado tu oficio y escancia otro vaso". Nehemías, paciente, llenó ambos vasos. Alzó el suyo y brindó: "¡Por las murallas de Jerusalén, mi querido Ezra!", mientras sonreía al escribano.
Robin no tardó en captar la ironía como buen historiador. Reconoció a ambos personajes y el texto que estaban componiendo. Recordó la dispensa del emperador aqueménida para que Nehemías se encargara de reconstruir las murallas de Jerusalén en calidad de virrey, ni más ni menos, de ahí la broma de Esdras. Pero también le vinieron a la mente los versos de Ezra Pound (...llevo 5000 años aquí sentado...) al caer en la cuenta de que Ezra era la forma hebrea de Esdras. Hechas las conexiones, el bueno de Robin se descansó para seguir el dictado de Nehemías:
El hombre ama a su esposa más que a su padre y su madre. Por las mujeres, muchos hombres han perdido el seso, han sido vendidos como esclavos, han sufrido grandes pesares y han arruinado sus vidas. ¿Me creéis ahora? Ciertamente el rey está investido de gran autoridad, ningún país se atreve a levantar un dedo contra él. Sin embargo, yo le veía con Apame, su concubina favorita, hija del famoso Bartaco. Apame se sentaba a la derecha del rey, le quitaba la diadema de la cabeza y se la ponía en la suya propia, y con la mano izquierda le daba un cachete al rey; y el rey se quedaba contemplándola boquiabierto. Cuando se le reía en sus propias barbas, él también reía; cuando se le enfadaba, él la mimaba para corregirla. Señores, si las mujeres son capaces de todo esto, ¿cómo negaremos su fuerza?" El rey y los principales del reino se miraron unos a otros.
El joven prosiguió, para referirse a la verdad: "Señores, hemos visto que las mujeres son fuertes. La tierra es inmensa, el firmamento está muy alto, el sol corre veloz en su carrera, pues completa el círculo del firmamento y regresa al hogar en un solo día. ¡Qué grande el autor de todas estas cosas! Pero también la verdad es grande, y es más fuerte que todo el resto. La tierra entera invoca a la verdad, el cielo la ensalza. Todas las cosas creadas se estremecen y tiemblan; si hay verdad, no hay injusticia. Hay injusticia en el vino, en los reyes, en las mujeres, en todos los hombres y en todas sus obras, y podríamos seguir enumerando. Pero la verdad permanece y es fuerte eternamente; vive y gobierna por los siglos de los siglos. En ella no hay favoritismo ni parcialidad; prefiere obrar con justicia antes que injusta y maliciosamente. Todos aprueban sus obras; la injusticia no se filtra en sus juicios. Suyas son la fuerza y la realeza, la autoridad y la majestad de todos los tiempos. ¡Bendito sea el Dios de la verdad!"
Así terminó su discurso (...) Entonces el Rey le dijo: "Pide lo que quieras, aunque no esté escrito ahí, te lo concederé. Pues has demostrado ser el más sabio; y te sentarás a mi vera y serás llamado Pariente mío".
Entonces el joven le dijo al Rey: "Recuerda la promesa que hiciste el día que subiste al trono. Prometiste reconstruir Jerusalén y devolver los vasos que se llevaron de allí y Ciro guardó aparte"(...)
El Rey Darío se levantó y le besó, y le escribió cartas para todos los tesoreros, gobernadores, comandantes y sátrapas, ordenándoles que dieran salvoconductos al joven y a todos los que fueran con él a reconstruir Jerusalén. A los gobernadores de Celesiria y Fenicia y del Líbano les escribió cartas mandándoles que transportaran madera de cedro del Libano y ayudasen a Zorobabel a reconstruir la ciudad. A todos los judíos que salieran del reino para dirigirse a Judea les dio cartas garantizándoles sus libertades (...)
Cogió las cartas y se dirigió a Babilonia, donde explicó lo sucedido a sus compatriotas judíos. Todos alabaron al Dios de sus padres por haberles dado plena libertad para ir a reconstruir Jerusalén y el templo que llevaba su santo nombre, celebrándolo durante una semana con música y festejos (...)
Nehemías y Esdras brindaron de nuevo, y siguieron brindando hasta bien entrada la noche. Robin, que se había mantenido a cierta distancia por una discreción que al tiempo le permitiera seguir el relato, se alejó meditativo entre los velos lunares. Pudo ver, como en un sueño, la figura del escriba y la del copero desvaneciéndose sobre el telar lechoso y transparente para reaparecer, translúcidos en ese viaje estelar, frente a unas murallas que se alzaban justo detrás de la Luna. Y allá se fundieron con la oscuridad. Si acaso el tintineo de una estrella no muy lejana.
Alguien musitaba por el jardín. "¡Esdrás!¡Nehemías!Me pareció oiros por este extraño valle...¿Qué no es este mi Valle Torrencial?". Robin, compadecido, le dejaba vagar bajo los árboles, cabizbajo con un aura de infinita melancolía. ¿O tal vez sabiduría? Algo le brillaba en la mano, como si un rayo lunar le incidiera directamente en uno de sus dedos: un anillo fabuloso, un hexagrama. "¡La Estrella de David!¡Claro!¡Es él! Hagia Sophia, la sabiduría divina. Querido Salomón, ¿dónde esconderias tu manuscrito secreto por el que suspiran los nigromantes de ayer y de hoy?"
Distinguía ahora Robin un aura blanquecina que seguía al viejo rey sabio por el bancal de huerta. El historiador rebuscó por entre los estantes de la Memoria. "¡Naamah!". Sí, era la consorte de Jedidías---como llamaban los judíos a Salomón---, de Sulayman---como le llamaron los árabes---. Portaba los Libros, Eclesiastés, Proverbios, el Cantar de los Cantares, y de la mano iba un niño, "¿Menelik I?" Se preguntaba Robin, "¿Era entonces cierta la leyenda de su encuentro con la Reina de Saba? El futuro, pasado, rey de Etiopía al que encargó esconder el Arca de la Alianza...Interesante".
Sobrevive la jacaranda a duras penas invierno tras invierno, Queda en sus huesos el frágil árbol con el frío, siempre al límite de su resistencia pareciendo sucumbir a la helada. Ahí siguen sus tiernas ramas llenas de jóvenes hojas preparadas para afrontar un nuevo invierno. Apenas crece, como si hubiera decidido no pasar de su infancia. Robin la contempla incrédulo preguntándose si alguna primavera, maduro el árbol, llegará a verlo echar sus hermosas flores, si llegará a ver la preciosa alfombra púrpura bajo su copa cuando el calor las consume tras haber dado su fuego. Quizá, se preguntaba, marche yo antes de que eso suceda.
Collingwood se pierde en el rosado horizonte que las nubes fracturan. Mamá gata ha traído tres nuevos cachorros que comparten amanecer y atardecer con el pensador pensado. Un visitante ronda la jacaranda mientras musita versos de Ghiyath al-Din Abu l-Fath Omar ibn Ibrahim Jayyam Nishapurí, Omar Khayyam para los amigos. Es un hombre menudo que dando vueltas a la jacaranda va a la par recitando al poeta:
"...Qué haré hoy?.¿Iré a la taberna o a sentarme en algún jardín, bajo la sombra de un árbol.¿Me inclinaré sobre un viejo libro?. Un pájaro cruza el espacio,¿a dónde irá?.Ya lo he perdido de vista. Embriaguez de un pájaro en el azul tórrido! ¡Melancolía de un hombre en la fresca sombra de una mezquita!..."
y reescribiendo las Cruzadas desde los cronistas musulmanes. Los gatos le observan desde sus escondrijos:
"...Si quieres tener la magnífica soledad de las estrellas y las rosas, rompe tus lazos con los hombres y aléjate de todas las mujeres. No te acojas a nadie; no alivies ningún dolor ni participes en ningún festín..."
"...¡Luna! ¡Mes! ¡Muerte! ¡Qué fascinante! Palabras asociadas en todas las lenguas, indoeuropeas o no. La noche percibida como un contrario al desarrollo de la vida, asociada en tiempos inmemorables al mal, un misterio pavoroso..."
El hombre se para. Contempla las flores de su mano y parece hablarles embrujado:
...mythos, logos, ethos, eros como amor desamor en toda estructuración social...
--- ¡Hombre! ¡Don Caro Baroja! Le veo a usted como hechizado.
---Pues sí---contesta el buen hombre que, ensimismado, continua su perorata llena de pequeños silencios entrecortados;
...adorábamos a la luna como regente matriarcal de los ciclos agrícolas, ritualizamos nuestra memoria de los antepasados, de las almas, decíamos, hasta ponerles máscaras e inventar el teatro, las diosas madre, el culto ctónico de nuestros cavernícolas...
El pequeño libanés, Amin, mira al vasco con ambages de admiración. Le había leído, Le repetía;
"...sólo un pensamiento analítico llega a separar al fin lo natural de lo moral de modo absoluto...y hablan de conceptos cultura, sociedad y de Historia como de conceptos distintos entre sí y aun encontrados con el de Naturaleza..."
"cada mito, celeste, solar, lunar, ctónico, tiene su función de orden moral, su significado incluso utilitario en la vida de la sociedad..."
El buen vasco, asombrado de su propia capacidad categórica, decidió un pensamiento de contraluz: ¿no es por ello necesario el contrapunto mágico como válvula desintoxicante de tanta fijación mental? Diría más bien inherente a las confabulaciones de la mente humana. Don Caro se había sentado en el banco que bordeaba la fuente por dejar que aquel aire benévolo le orease las neuronas:
"...Qué haré hoy?.¿Iré a la taberna o a sentarme en algún jardín, bajo la sombra de un árbol.¿Me inclinaré sobre un viejo libro?. Un pájaro cruza el espacio,¿a dónde irá?.Ya lo he perdido de vista. Embriaguez de un pájaro en el azul tórrido! ¡Melancolía de un hombre en la fresca sombra de una mezquita!..."
y reescribiendo las Cruzadas desde los cronistas musulmanes. Los gatos le observan desde sus escondrijos:
"...Si quieres tener la magnífica soledad de las estrellas y las rosas, rompe tus lazos con los hombres y aléjate de todas las mujeres. No te acojas a nadie; no alivies ningún dolor ni participes en ningún festín..."
Se preguntan si en algún momento romperá el círculo para echarles algo de comer. Mamá gato ya decidió dejar de darles de mamar. No. Se para y farfulla, toma notas en su otra mano:
"...y llamaban farany, ifrany, finalmente frany a los Cruzados francos de cuyo terror salvamos el Corán de Othman en el verano del 1099. La hégira de estos refugiados los convertiría en los muhayidin por excelencia buscando asilo entre los sucesores del profeta: los califas. Además estaban los rum o romanos, como nosotros les llamábamos, es decir los griegos bizantinos aplastados por los turcos selyúcidas llegados del Asia central, miles de jinetes nómadas de largos cabellos trenzados arrasando desde el Afganistán hasta el Mediterráneo..."
Pobres rum, pensaba el bueno de Amin. Se había parado. Alguien subía de la huerta con un puñado de amapolas en su mano. Caminaba meditabundo y también parecía estar hablando consigo mismo. A Amin le pareció escuchar, mientras se aproximaba sin darse cuenta de su presencia:
"...¡Luna! ¡Mes! ¡Muerte! ¡Qué fascinante! Palabras asociadas en todas las lenguas, indoeuropeas o no. La noche percibida como un contrario al desarrollo de la vida, asociada en tiempos inmemorables al mal, un misterio pavoroso..."
El hombre se para. Contempla las flores de su mano y parece hablarles embrujado:
...mythos, logos, ethos, eros como amor desamor en toda estructuración social...
--- ¡Hombre! ¡Don Caro Baroja! Le veo a usted como hechizado.
---Pues sí---contesta el buen hombre que, ensimismado, continua su perorata llena de pequeños silencios entrecortados;
El pequeño libanés, Amin, mira al vasco con ambages de admiración. Le había leído, Le repetía;
"...sólo un pensamiento analítico llega a separar al fin lo natural de lo moral de modo absoluto...y hablan de conceptos cultura, sociedad y de Historia como de conceptos distintos entre sí y aun encontrados con el de Naturaleza..."
Una campanilla vibró en las profundidades del jardín hasta hacerse voz, una pregunta que se arremolinaba en lo que antaño fue una fuente: ¿acaso implica la conciencia del sí-mismo una moral que sin ese mirar esquizofrénico yo-Ello nos devuelve a la naturaleza indivisible?
De repente arbustos, ramas, hierba, pájaros se armonizaban como un fluido ballet cuando el viento traspasaba el jardín con una mano suave que lo acariciara. Sobre esa ola perfecta, las palabras que Caro exploraba se montaban como si un experimentado surfista aprovechara ese impulso para explotar su virtud: "cada mito, celeste, solar, lunar, ctónico, tiene su función de orden moral, su significado incluso utilitario en la vida de la sociedad..."
El buen vasco, asombrado de su propia capacidad categórica, decidió un pensamiento de contraluz: ¿no es por ello necesario el contrapunto mágico como válvula desintoxicante de tanta fijación mental? Diría más bien inherente a las confabulaciones de la mente humana. Don Caro se había sentado en el banco que bordeaba la fuente por dejar que aquel aire benévolo le orease las neuronas:
"...la abuela, con su mano oscura, va arrancando hierbas y me explica las cualidades medicinales del hipérico, de la betónica y del llantén, así como la misteriosa fuerza del helecho, del pegajoso pazote y del polvoriento licopodio...
---Pronto han salido las opiatas, ¡mal año de setas! Poco te preocupas de los pobres, Señor; para el pobre, ¡hasta la seta es un manjar!...
Nos internamos cada vez más en el bosque, en la niebla azulenca, cortada por los rayos de oro del sol...Chirrían los picocruzados, alborotan los paros, se ríe el cuco, silba la oropéndola, resuena de continuo el celoso canto del pinzón, canta también con pena un pájaro raro: el picogordo. Unas ranillas de esmeralda saltan de nuestros pies; entre unas raíces, alzada la cabeza de oro, guardándolas, yace una culebra. Sonora, parte piñones la ardilla, en las anchas ramas de los pinos se columbra por un instante su esponjosa cola: es increíble la cantidad de cosas que se ven, y se quisiera ver más todavía, adentrarse sin cesar...reza entre suspiros la abuela...En el bosque parece la dueña de todo, algo consubstancial con cuanto la rodea; camina como una osa, todo lo ve, todo es objeto de sus elogios y motivo de su gratitud..."
---Pronto han salido las opiatas, ¡mal año de setas! Poco te preocupas de los pobres, Señor; para el pobre, ¡hasta la seta es un manjar!...
Nos internamos cada vez más en el bosque, en la niebla azulenca, cortada por los rayos de oro del sol...Chirrían los picocruzados, alborotan los paros, se ríe el cuco, silba la oropéndola, resuena de continuo el celoso canto del pinzón, canta también con pena un pájaro raro: el picogordo. Unas ranillas de esmeralda saltan de nuestros pies; entre unas raíces, alzada la cabeza de oro, guardándolas, yace una culebra. Sonora, parte piñones la ardilla, en las anchas ramas de los pinos se columbra por un instante su esponjosa cola: es increíble la cantidad de cosas que se ven, y se quisiera ver más todavía, adentrarse sin cesar...reza entre suspiros la abuela...En el bosque parece la dueña de todo, algo consubstancial con cuanto la rodea; camina como una osa, todo lo ve, todo es objeto de sus elogios y motivo de su gratitud..."
La maestría de Gorki le vino a Caro como jugosa bocanada de un frondoso deleite. Sin advertirlo, un nuevo vagabundo errante de los mundos donde los libros hablan incesantes andaba fantasmagórico por donde los geranios. De repente se paraba y una suerte de eructo silencioso brotaba de todo su cuerpo evanescente. Y al hacerlo, una perla caía en cada tiesto. Don Caro se acercó intrigado. En cada una de ellas había algo escrito en su interior: al mirarlas, las letras se seguían unas a otras como flashes de luz:
"La producció és la creació del pobre"
Otra:
"Per protegir-me de la gent
els faig riure. No es pot
mossegar i riure tot alhora"
Otra:
"De vegades la veritat no és
sinó una mentida pronunciada
amb tranquil.litat de consciència."
Don Caro reía abiertamente ante la frescura de cada adagio, tan llenos de saber en su magnífica sencillez. Y otro eructo:
"Nero calà foc a Roma per tal de
rescalfar-se el cor. Vet aquí la tècnica
dels guerrers i dels poetes."
Caro seguía la hilera de tiestos por donde aquel joven iluminado iba vomitando su sabiduría. Los pétalos esplendian:
"És ben fàcil:
No sóc pas homosexual
i quasi tampoc heterosexual"
Y el viejo Caro reía como un niño.
"La sensació de ser creador no és sinó qüestió d'incultura. L'infant
té la impressió de crear-ho tot perquè
tota cultura li és aliena."
Las cejas de Caro se alzaron de admiración. Quiso saber el nombre de este maravilloso juglar del pensamiento y, efectivamente, la siguiente perla se lo reveló: Josep Tordera. No más lo pronunciaron sus labios el errante pensamiento, perdón, pensador, se esfumó como luz que se apaga.
Amín, que había quedado abstraído por este espontáneo cruce de saberes tan diversos, resopló y siguió a lo suyo;
"...por eso el llamamiento del Emperador Alejo al Papa para la guerra santa contra el resurgir del Islam, Danishmend el Sabio usando sus almajaneques de asalto. o las drómonas del emir Chaka para ocupar Rodas, Kios, Samos desde su base en Esmirna intentando conquistarle Constantinopla a Alejo, pero Kiliy Arslan, hijo de Suleyman, apuñala a su suegro en un banquete tras emborracharlo y se alía con Danishmend contra los rum y los frany, la derrota de Dorilea..."
Los apuntes se le estaban desdibujando por el repentino frío que le hacía temblar el pulso. Pero había decidido novelar la voz de los cronistas musulmanes que vivieron Las Cruzadas y tenían un punto de vista tan distinto de la estigmatizante versión cristiana, papal.
El bueno de Collingwood había cambiado su puesto de observador y oyente. Desde la terraza contemplaba el devenir de Amin y Caro en sus mundos llenos de conjeturas, de los asombros que viejos cronistas les procuraban, de los diálogos entre historiadores y los diálogos consigo mismo. Sin saber muy bien por qué, probablemente inducido por Amín, rememora su visita a las ruinas de la pirámide de Hawara, cerca de El Fayum, el Egipto predinástico...Pero Amin le trae de nuevo a las Cruzadas:
"...el emir Yaghi Siyan defiende la inexpugnable Antioquía de los franys en el 1097, la vieja ciudad que antes del Fath, la conquista musulmana, fue metrópoli romana con 200.000 habitantes y ahora no tiene sino 40.000 con los campos de cultivo intramuros hasta la alcazaba...Los cristianos de Oriente, griegos, armenios, maronitas, jacobitas o los exóticos nasara o seguidores del nazareno están en difícil posición..."
Como yo, debía pensar Amin, se decía a sí mismo Robin. Un libanés en el jardín académico occidental, lo que ahora llaman un mediador internacional solo que a Amin, conjetura Robin, cualquier adscripción institucional le sobra, Grande Amin, un pensamiento-acto espontáneo propio de un altruismo natural, obediente a su relación santa, a su verdadero ser. Sí, pensaba Robin mientras sorbía su tonificante té verde, hay gentes así, personas que ven con clarividencia cualquier desequilibrio entre fuerzas de escala planetaria e histórica y son capaces de acentuar o iluminar la sombra que perturba a su opuesto con tal de compensar, con la simple idea amagada tras su dicurso o pensamiento-acto, ese desequilibrio incluso si su figura personal, aquella con la que el mundo le identifica, queda denostada. El británico volvió a escuchar con atención:
"...Mosul, la capital de Yazira (Mesopotamia, esa fértil llanura irrigada por Tigtis y Éufrates), de donde la muselina, el fino tejido exportado...los manantiales de nafta, el betún, el valioso líquido pardo que un día será la riqueza de esta parte del mundo, el petróleo..."
¡Qué grato ese pequeño bit de información! Pequeñas reliquias que nos permiten dar sentido al mundo en que vivimos, pequeñas piezas de este puzzle infinito que empezaste a formar de niño, palabras que has oído en las noticias mil veces pero desconocías su origen:
"...mamelucos significaba esclavos (turcos?), y llegaron a ser sultanes, como Karbuka, sultán de Mosul, el atabeg o padre del príncipe...los pendones negros el emblema de los abasidas y los selyúcidas, jinetes de blanco...Contaba Abul-Ala al-Maarí, el poeta de Maarat que vivió hasta el 1057:
Los habitantes de la tierra se dividen en dos. Los que tienen cerebro pero no religión. Y los que tienen religión pero no cerebro
o también:
El destino nos destroza como si fuéramos de cristal, Y nuestros pedazos nunca más vuelven a unirse
Frente a Abul, Raúl de Caen, cronista franco:
En Maarat, los nuestros cocían a paganos adultos en las cazuelas,
ensartaban a los niños en espetones y se loscomían asados...

























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