aquí llego mar de nobles escenas, viento que nada sujeta, un timón que en la noche me sonríe, cielo hondo cargado de probabilidades, románticos números entre nubes y olas. Habrá imágenes que enviar con su salitre y su calor humano, dulce relente nocturno que el viento acaricia. Noble escena en su perfecto marco
es notable tu acompañamiento de postulados y correcciones acometiendo momentos, el recuerdo de formas que ahora, con esgrima verbal, interpretas
haces de cada duda pantalla de bonitas escenas, superan tus actores la realidad, clavan su idoneidad en tu alma, sencilla acción de mezclar los componentes elegidos
me has dotado de absorbentes sentidos, de las manos que manejan mis dramas, libres de cualquier opinión. Secuencia la memoria el juego de las olas
de cada escena un romance que aventurar, van las manos al mundo y su historia a explorar amorosas los más lejanos confines
haces presente el humor que no había, atraviesas tus personajes con una sonrisa recreativa ajena al lance actoral, entrañables añadidos como inesperadas ocurrencias, pequeños repuntes emocionales que estabilicen tu tiempo. Sí, enriqueces tu sueño con gráciles anacronías ausente de cualquier rigor
aquí llego viento como fuerza dominante y su deseo de vida,cada ser un posible desvío
y llegas música en variados fragmentos de incalculable belleza, melódicos insertos, festivos, solemnes, épicos fotografiando mi relato, vibrando en trepidantes imágenes, persiguiendo olas en desconocidas combinaciones, idílicos desamores, bien encuadrada tu sombra sobre las aguas. Me ha prestado atención el mar, navío de esforzados marinos rinde su testimonio a cada colorista recreación
narra mi pulso su aventura con hábil determinación, inspira mundo adquiriendo esbozos del mismo, se ajusta a la explicación más simple que completará, a los motivos que aceleran el curso de las olas, la noble escena
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