sábado, 22 de marzo de 2025

Tuve que correr. A, por, desde Antonio Vega

es tu ademán unitario, pedagógica colaboración con la multiplicidad de formas, psicológica cirugía en las áreas que rozan tu piel, propelen el corazón que ves entre las nubes, alteran tu aparato locomotor especificando nada

ese diseño psicomotriz habilita tu adquisición de habilidades contemplativas: partiste hace mucho tiempo ya 

has entrelazado intensidades con cuidadosa atención, la apropiada respiración, los adecuados nutrientes espirituales 

correspondes a ese madurar remodelando tu estructura nerviosa, reconectando cerebro y médula, acolchando nervios y músculos, el aprendizaje de un bebé rodeándose de mundo

ya te equipaste con las enfermedades precisas para tu desarrollo, los cuentos necesarios que captaran tu atención, los desequilibrios familiares justos para obtener las dudas adecuadas 

varías el motor psíquico según ambientes por estirar tu potencial genético con pedagógica precisión  

departes multidisciplinar con los diversos lenguajes, unificas luego el discurso como pincel a un bizcocho, te permites incluso infantiles diagnósticos 

también terminas motricidades inertes que ya te dieron, observas esas habilidades en una línea temporal a la que das continuidad 

te sigo con infantil permisibilidad, tanteo los estímulos adecuados, generan la información pertinente, tomo de tu actitud sin alarma y camino evitando el riesgo adolescente; descubro así la capacidad real de las cosas, perfilo con precisión el daño posible, mi propia rehabilitación

un Cuándo empieza su desarrollo

bebe el cerebro de tu saber con vulnerable sensibilidad, aprehende vida o lo que así parece, adecua neuronas en perpetuo intercambio

soy continuo embrión, feto asistemático que los nervios configuran, parlanchinas células multiplicando información sin desplazarse, conectando oportunidades en elaborados conceptos que, incansables, mueren y nacen como pequeños infantes sacrificados

me aplico una atención consistente, toda estimulación acallada, me despersonalizo con sentida armonía, la mínima motricidad 

tiendo a globalizar mis secuencias mentales en pos de un principio universal, el desarrollo de la mismidad en todo, una velocidad que voy fechando de adquisición en adquisición. De la diversidad dependo como potencial génesis de ambientes, de existencia me rodeo tal desamparado niño 

qué es la atención primaria, aquella motricidad primera, la brutal inflación 

el maestro es un ente familiar, merece tu cuidado cuando se aproxima, trata tus tóxicos con anticipación, rebaja el peso de tus pensamientos, alivia tus nacimientos, te asistió con el aire que respiras parándote el tiempo

¿cuáles son tus infantiles riesgos?

valoras tu experiencia como propia, separada, tus psíquicas adquisiciones como ocultas, proteges al niño del saturniano mundo, tan voraz, su dermatológica sensibilidad

ya embargaste tu salud en la vigilancia del programa biológico, en el riesgo de la posibilidad más anómala, la extenuante motricidad

y evitas la alarma del niño siguiendo los pasos de tus ancestros, el ritmo determinado que tu experiencia detecta 

todos tus niños se van desprogramando punto por punto temporal, su feroz competencia previenes en el punto y seguido, desbloqueas neuronas desde lo antecedente, su deficiente visión, la baja frecuencia auditiva que determina su olvido, la malformación de su entorno. Les sigues de cerca variando tu prisma 

cuáles los merecimientos de tu especial vigilancia

vas principiando aspectos del ser que ahora sí observas

y en ofrenda los elementos de toda experiencia referencial en un ademán unitario 

lunes, 17 de marzo de 2025

Krishnamurti and Osho sitting on Saturn rings SIN FONÍA (de los avatares)

te me fallé ajeno al corazón del cosmos, no llegué a la gran cabeza de incontables neuronas chisporroteando de vida, no llegué a mi propia humanidad: sólo necesitaba respirar, el foco exacto. Diferí del tú con toda mi fuerza, un ser inalcanzable como palpitante corazón entre galaxias, una belleza que me abruma repitiéndose en bonitas palabras que el tiempo vacía. Quisieras cerciorarme en cualquiera de tus filosofías y fórmulas, sentir la inmensidad y poseerla con tu magisterio, pero no puedo ayudarte. Oriéntate 

te amo entre las filosofías y los números que te acercan a la no-forma, en la mística de tu ignorante ensimismamiento donde la razón fracasó. Tú ahora es único en contemporaneidad, tan cerca de mí como línea tangencial entre hemisferios. Te detienes, dejas hablar al miedo y sus viejos patrones, entras ahí, con ellos, los purgas de misterio, sales 

no niega el ahora tu entretenimiento, no condena la forma, es testaferro de tu mundo. Lo ominoso es una cierta iluminación de amplio espectro susceptible de todo 

me has conocido en más de una ocasión entre miles de seres, me has incluso seguido por algún interés oculto, has encontrado caminos hacia el santuario íntimo de tu verdad silente. Esa consistente conexión te allana el camino, incluso te precede. Trabaja tu intelecto en la amplitud de espectro, horada hacia el corazón de un sol oculto 

eres naturaleza y sus molestas personas, te conozco tal vienes como un soplo de melancolía que se torna incomprensible júbilo, sólo habla el nunca sin más recurso que la propia existencia. Me te fallé en la falsa incompleción, dijera lo que dijera en la falaz certeza y sus semillas, la humana decepción ante lo humano, la luz de esa enseñanza 

es el Esto una continua cuarentena mental ante la idolatría, un nadie en el arduo camino que el vértigo estira hacia infinito, una disposición interna a lo invisible, guías de lo posible a través de la forma. Y, de hechos, me lo dices 

genera tu mente el problema que ya aceptaste, subrepticio entendimiento que busca satisfacción siguiendo a nadie, resistente fondo

luchas los años alterando significados, los hago amigos presenciales lamento y euforia, les doy vida con entretenida escucha, van y vienen en una aparente continuidad, toman personas que los vocearán como si fuera la primera vez, santificado sea su nombre tal la primera onda haciendo latir el corazón del cosmos, el tuyo 

me van rodeando esas personas, creencias que adquieren forma o no, chispas que se encienden y se apagan según las trampas que se ponen

se reúnen los egos para el autoengaño convenido, la falacia a seguir, un alguien que dice entender tu soledad, incluso guiarte. Creen pensar en lo real, sin concesiones, y esa realidad acude

con los más hermosos pinceles me engaño entre los sucesos, les dibujo opuestos que articulen pensamiento, a esa selección me entrego en ergonómica adaptación, razonada. Y me siento

es posible la ayuda que a tí acude ahora y en todo momento, microscópicos puntos de escucha que para tí se abren por darte sentido, breves recorridos de aparente soledad donde descubrir, una revelación de fondo, un magisterio como actitud 
ilumina ese recorrido espacios insospechados, la sonrisa de una constelación lejana, el sentimiento que su belleza te genera, tu potencia creativa. Te aleja del mundo que conoces, te transforma en poema floreciente en su jardín interestelar, hace de la materia grácil liviandad, corazón latiente te redime 

miércoles, 12 de marzo de 2025

John Dewey and Williams James beyond the glass SIN FONÍA (de los avatares)

tu verdad inherente muta al apropiarte de ideas, aconteces verificando con frágil consistencia tus sentimientos, quizá una agradable armonía progresando, siguiéndose adecuada a los sucesos: experimentas. Tu verdadera función cumple con las herramientas otorgadas, una utilidad que a cada elección te guía, una realidad dirigida hacia la forma idónea que te cuadra. Participas de un bien práctico como necesidad vital, síntesis útil por entender que el ser conserva por tí 

entre fronteras éticas te mueves con pequeños pasos colonizadores, rígido, dúctil a nuevos territorios mentales, control, descontrol, procuras organizarte, permeable, impermeable. Relativizando principios te estratificas, practicas herencias históricas que vas democratizando entre acción y reacción, evolución e involución en los giros de la gran sierpe. Te definen climas y sus filosofías adyacentes jugueteando con el tiempo 

veo hoy los puntos en sinuosa curva, una visión ahistórica peculiar, un momento de vida 

funciona un psicologismo de escuela tal surge de los siglos, del dinamismo de cada enfoque, de lo práctico a lo metafísico en un gran árbol de donde cuelgan las mentes, pequeños frutos que el entorno colorea. Desarrollan respuestas que la estructura imperante limita, dominios de época focalizando su análisis más depurado, de lo esotérico a lo exotérico. Te miro y cambias, perpetuo estado seminal: "eres único-prescindible/ eres encantador-maltratador/eres bueno-malo/eres tonto-listo...", un principio de cansancio, la bella y la bestia sin género. Me propone cada enfoque una amplitud de miras, una comprensión interesada de esa mente funcional, la cotidiana vida que te adopta y te adapta, un entorno centrado que te afila si no te mata, una estructura escolar de múltiples relaciones. Contribuyes como significante al que significar entre énfasis y silencios, una conciencia a la que darle uso. Tu pequeño proyector trata de simplificar entre duales conjuntos que pretendes pasivos en la estructura que te conviene, un sistema que activar con ínfulas de certidumbre, dinámicas de competitiva adaptación que volcanes y raíces te demandan, el ambiente que generas. Teorizas un Yo separado, un movedizo iceberg con cima y fondo al choque con otros supuestos Yoes, una interacción reglada como supervivencia mayoritaria, periódicos hundimientos. Te menciono en la emoción, sensorial respuesta que conecta el adentro y el afuera, en cada argumento me acompañas consintiendo mis cambios, mi insospechada reacción. Se acelera tu ritmo en el miedo pasajero 

esta escuela láctea desarrolla sus corrientes de pensamiento entre hemisferios, arte y uso, perspectivas de un legado primordial que sin límite los trasciende, una academia que fluye hacia el conocimiento puro. Te adaptas marca tras marca en el campo indeleble de lo inmutable, una infinita diversidad que se te escapa 

fluye uno de tus lados con ideas refinadas, amplía sus funciones con remozadas teorías, ha variado sus creencias sin separarse del cuerpo de creencias, actúa acorde a ese mundo. Considera esa verdad temporal lograda abstracción próxima a lo absoluto, a la constante evolutiva en su farragosa dialéctica, la x y el ansia de conocimiento. Mi educación se orienta hacia la solución, el problema que hago real, costosa praxis que deviene irreflexiva, un proceso más de aprendizaje, un significado al remozado significante que me haga sentir relevante. Te estudio crítico con progresiva resolución, de lo práctico a lo inútil y vuelta cribando el oro, una realidad depurada, una temporal convicción y su amagada chispa creativa, tan poco práctica. Enfatizo mi propio contexto siendo su comportamiento un reflejo de mis emociones, aguas turbulentas, un mar en calma. De repente la sospecha de un vacío absoluto, la absoluta sencillez, tan complejas a tu pequeño proyector, la inherente verdad 

viernes, 7 de marzo de 2025

OdePics XVIII

   decomposing

   rococo stem

   sap and lava worlds

   life in the grotto

   woods congregation

   will wheel

   flighty sand

   wood and stone

   the wing and the shadow

   biocapital

   weird wading bird

   my turfy leg bones

   alien monk

   inner pilgrimage

   black and white and the                     uncomfortable witness

   rock'n cirri

   hungry teeth and the scars 

jueves, 6 de marzo de 2025

Islands. King Crimsom CONFONÍA

llega el momento coral de magníficos efectos, se me dobla la voz en diferenciados fragmentos, repiten ciertas palabras su acústico fraseo, su versátil entrada interfiriendo al coro, tratando la imposible sustitución de lo que es; se me dobla la voz con una posterioridad entregada, repite caducas interpretaciones por sentirse viva, ahora 

doy bandazos entre las rocas, pequeñas y grandes, progreso apenas resurgiendo entre los años, mostrándome primoroso, resonándome distinto. Moldean los hechos una identidad de la que apropiarme por seguir experimentando formas, abarcarlas entre sus oscilaciones, la sinfonía abierta 

el Cuánto trata de integrar grupos de trabajo con artística definición, funda su muerte supergrupos permanentes que a su vez fenecerán en la escena apropiada, su forma quizá duradero icono. Formo parte de esa masa solícita de diversas aristas, esas alineaciones momentáneas 

me analizan tus maneras tal obra retrospectiva, pueden observar los remanentes que el entonces subestimó, considera el ser etapas en perpetua transición con su pertinente grupo. Posees la necesaria atmósfera oscura con que requerir tus ideas, la sigilosa escucha con que apreciar lo que no viste en su momento, descubrir una belleza inclusiva que rescata los aspectos que la luz del día oculta, la ofrenda rechazada por alineación indebida 

están tus referentes en una danza discontinua, te trabajan incertidumbre como móviles islotes de una neurosis asumida, te trabajan diversidad a capela, el límite de la muerte le pones como brutal cerrojo. Y sigues trabajando de lo clásico a tu vanguardia como fiel acólito del Universo que manejas, aceptando, rechazando según tu ánimo, integrando, desintegrando con oficio cualquier forma de liderazgo, depurando la información que te sobreviva 

te corteja el momento, esa lagartija que en tu presencia danza, se posa en tu mano, y desaparece. Queda un puñado de letras, sonido oculto, la luz que resta. Incorpora el ser algún ave como testigo que en vuelo emerge, cae el Cuándo programándome el día, el mes incluso con todo un repertorio de fantasías, nota a nota 

no quiebra la ruptura tu raíz, ensaya en el rechazo nuevas composiciones, deseos por desarrollar, las deudas contratadas que afrontar, lo acordado para tu tiempo. Regresaste a tu lazo terrestre como forma de vida,  antiguo seguidor de viejas diosas 

vas alternando tus presencias en sesiones controladas que el tiempo ubica, con tu ábaco anímico las concluyes, una asistencia musical que invita al giro, incluso en forma de danza. Componeís inicios en arco de múltiples posibilidades, voces que entran a granel con su más aguda interpretación, maneras, estilos, la estrofa práctica del día a día, la contundente melodía de cada accidente que nos marca, la diversidad más sonora implementando sus ritmos, la atmósfera alucinógena hasta la angustia, o la grave voz pautada en los acuerdos 

colaboran las islas despidiéndose de aves y reptiles, sienten tu gusto por el trabajo bien hecho, una posterioridad asociativa. Contribuyen al tema cósmico en absoluto anonimato 

tuvo la inspiración a bien escribirme las doradas letras en recientes penínsulas del pensamiento, cada isla describiendo su paisaje más recóndito, señalándome lugares ocultos, hechizándome con lumínicas delicias sin referente alguno. El tema forma parte de un repertorio incognoscible, ladea épocas, voltea nombres

reaparece un minuto de silencio, ser sonando aflautado al fondo de la escucha, conversa contigo afinando cuerdas, te sigue en la precisa indicación del tema, termina abrupto 

sin todavía que concluir entran planetas y anillos de materia iniciando su relato, navegas su ritmo junto a tu propia interpretación, te contrapuntea con su gravedad como un rasgueo de hacendosas guitarras sobre el fondo de un terrible melotrón. Subes el volumen de tu tema, te aceleras, cada impresión compitiendo entre sí, queriendo sobresalir en su expresión hasta extenuarte, navega el relato mezclándose con la inmensidad. Pervive cada interpretación en la banda adecuada, que recuperarás con nueva formación

conforman los temas sus lenguajes, atribuyen autorías en lentos procesos de formación, ensayan sus cosmológicos arpegios uniéndoles voz, repuntan delicadas estrofas estelares que acompañarán frenéticos ritmos hasta el colapso, pausas de sobresaliente ejecución. Hay golpes, marcas en el pentagrama, un tono violento aquí y allá, una abrupta conclusión. Planetas y voces cantan lo que parece una última estrofa. Se han perdido las letras en la vasta oscuridad

esta melodía proviene de vida coagulada, la interpreta en vívidas formaciones derivadas del tema, pueden caer como lluvia precursora de futuros nombres, cajas de resonancia con miles de versiones recopilándose entre lenguajes, giratorias letras del infinito repertorio, la vida ahora 

sigue siendo el canto último el primero, sigue cada isla escribiendo según su atmósfera, siempre cambiante, siguen las letras sintiéndome entre edén e infierno, comenzando formas con ritmo comedido, alocado en su más superficial interpretación, en arcos imperceptibles que el Luego deja transcurrir, minutos que el presente cornea hasta sentirte ser. Vienes dominante como sonido de fondo contrarrestando mi manierismo, versos aflautados guiando el canto último, un suave coro llevando mis latidos en aparente armonía, es el presente ya posterioridad, fondo in crescendo a medida que canto, una mera conclusión. Giran las letras en el cosmológico caleidoscopio, el repertorio infinito 

ladea de nuevo la composición mis referencias, pequeños destellos de conocimiento, eléctricas presencias marcándome sus acordes. Entran las melodías cogidas de la mano revoloteando entre los versos, van agregando sinfónicas brevedades que quizá se desarrollen, voces que subirán el tono 

continúa el giro con sus preludios de diversa procedencia, su tema con alegre demencia creativa, piezas de un archivo colosal orquestándose para una sinfónica brevedad, una belleza inaprehensible donde nada sobresale, un fondo sin créditos, el momento coral de magníficos efectos 

lunes, 24 de febrero de 2025

Favonio. Rosa de rumbos

te pongo los vientos sobre la mesa jugando con tus horas, subo de grado cuando te superas en tu periferia emocional, y en los más profundos valles interiores. Registras los máximos y los mínimos de esa temperatura comunal, tu región de los vientos combinados, de tus masas de aires en altura. Alcanzas grados de observación desde alcantarillas al vuelo de las aves

con nombre antiguo te llamo repleto de probabilidades, derivas tenebrosas en el ocaso de tus cualidades, sibilantes vientos que desgarran el sentido de tus cosas, favorables vientos que te alivian del roce doloroso, que traen la lluvia a tu cultivo 

eres viento de una afectiva mayoría, arrastrada humedad que desata borrascas. Te moderas rebasados tus límites con inmoderada velocidad, rebajas fricción, suavizas las horas, centras el día

la orientación adecuada me susurras con cálido abrazo, me das las vertientes de pensamiento más remotas, y las más cercanas de esta brisa costera, la fuerza interior en la más limpia incertidumbre, moderas ego y mundo  

modela la inversión perceptiva comportamientos, genera el miedo el síndrome del faraón: acapararlo todo, llevarse todo y a todos a su tumba, la absoluta destrucción que sus fieles exigían. Sí, sube la temperatura, se secan las almas en las mesetas de una uniforme ceguera, se preparan para el ingente sacrificio, en el que todavía creen, la viaja hecatombe, gira el cósmico eje axial que aquí llaman cruz deviniendo esvástica, vieja visión hindú. Llegan inviernos artificiales, la sustitución de especies, un nuevo experimento de la ley natural sosteniendo su impulso primigenio. Tú le eres indiferente, no eres la existencia. Vuelven los vientos a posarse sobre la mesa 

viernes, 21 de febrero de 2025

Alaska/Time to kill. UK LIBRO YLÍRICO

miembro de un sí genérico me incluyes rozagante entre los más exquisitos escenarios donde progresar, las rocas como antecedentes de previas formaciones mentales. Tocábamos en comunión toda duda con inestable pálpito hasta su disolución. Y nos íbamos en momentánea separación. Algo nos emplaza a seguir un poco más allá, donde los principios

fuí roca en progresión, la alargada vida que me mantiene activo 

grabaste en mí tu nombre captando mi creciente atención hacia toda forma de fusión, los sucesos que alientan mis giros copernicanos abandonando cualquier centro, estableciendo nuevos emplazamientos mentales, un Casi lo abarco todo. Tengo en ese saliente un transitorio balcón privilegiado, un lugar donde rememorar la grabación original, el vértigo de nuevo giro, otra separación momentánea. El disco solar revive cada testamento significativo, me convierte en miembro de su genérico Sí rehuyendo cualquier polémica. Ese disco forma personas, están en tí. Destacan principios como maestros de una inconcebible majestuosidad, conciertos que retratan materia inédita, dudosas apariciones con interesantes epitafios

mis vocales bajan al subsuelo como miembros de su carmesí corte, trabajan un nuevo Sí genérico sin veto alguno, proyectan nuevas fugas de innovadora rítmica 

este invierno anuncia su creación con una música accesible 

hay intentos interpersonales de compartir la grabación original, reuniones que cuajar 

decide ese trabajo una pasajera unidad, solícita, reformadora de la corte carmesí, tan impregnada de savia fresca. He disuelto Cuándos en una positiva negación, duales traídos por viejos compañeros del tiempo con toda confianza, cada uno entrando en su lugar. Encuentran trabajados conocimientos que distintos avatares reclutaron, miembros de una maquinaria bien engrasada captando la atención de toda forma de fusión. Sigue ese trabajo deliberando diferencias sobre el viejo gravamen, alternativas de apariencia en el giratorio disco. Su amabilidad me conforma 

"una palabra no dice nada y al mismo tiempo lo dice todo..." cantaba el aedo: lo posterior colabora contigo en todo momento, las cenizas traen a tu soledad la vieja chispa, no puedes echar de menos 

los diversos giros acerarán tu disciplina, pulen tu nombre de impurezas, a todo te unen. Marcha lo posterior a su fuente primigenia, recluta conocimiento puro, novedosas formas que captarán tu atención, toda una batería de lenguajes integrados con que expresarte. La violencia del giro es un concierto galáctico, un plan desconocido, un Sí genérico, rozagante 

lunes, 17 de febrero de 2025

Song of the Aisors. Gurdjieff

se desarrolla tu linea espiritual según continentes, retomas  enseñanzas de estelares maestros, aprendizajes del continuum y sus líneas en un orden inconsciente. Tomas explicaciones como indigestas pócimas que mueven tus entrañas, una aspersión de símbolos que psicologizas llevándolos a su digerible enseñanza; luego los devuelves a su posición inicial donde su gramática recupera el significado original, su fuerza espiritual

tu es es dar como mediación de conocimiento, conlleva transmisión por los caminos de tu mundo, una enseñanza impersonal que protege su misterio, sin imagen carismática, un agudo sentido elevándose sobre cualquier cultura. Acapara tu atención hacia una guía evolutiva posible que no desfallece, estudia toda obra del espíritu relacionándola con lo absoluto, renovando sus objetivos en la evolución de esa consciencia

sostiene la existencia los caminos a transitar, una latencia suprahumana que todo aglutina, su abandono hacia otros senderos de luz, todo artificio como entretenimiento, juguetes con los que adormecerte. Te ofrece ser cada escuela, cada camino una corriente donde lo físico, lo intelectual, lo emocional afluye en un ambiente cotidiano: vives

me muestras la evolución como crecimiento, la interiorizo con pequeñas aperturas que emanen formas sin requerir conciencia de un conocimiento previo, directo y preciso impacto que el yo cree controlar. La ayuda es una guía con experiencia ajena a mí, prolonga mismidad, perspectivas de una misma realidad. Escribo del todo en libros de ilógico razonamiento que refuercen tu lógica, endiablados relatos de una destructiva imparcialidad, implacable cosmos, una total falta de compromiso personalizado, el desarraigo de creencias y opiniones que los siglos sienten, la respetuosa lectura de todo texto como revelación, sin prueba de falsación. Y te encuentro entre los hombres como alegoría de un mismo proceso de búsqueda, tan familiar al cosmos. Con ese material me familiarizo para cada nueva creación: solidificará. Miro y está, no miro y soy. Me contribuyes al surgimiento de mente y mis sentimientos lectores, mis más ficticias representaciones barnizadas de verosimilitud, una veracidad inalcanzable, detallistas, imprecisas, la ilusión que percibirás, un amago de existir. Va y viene la mensajera, siempre joven hija de Taumante: sé paciente, calla. Son sus aforismos un guiño natural, sin sentencias, una súbita inscripción en el tejido espaciotemporal que bordas, tu hogar 

instituiste el número como sintética otredad, pensadores del potencial humano en movimiento, en ese estudio viajas por corresponder a toda tipología, sus psiquiátricas categorías en el afán de conocerte, hasta el breve esquema como peldaño

carece de significado lo verdadero, cada significante una fuente de discusión, pero reconoces al maestro, el carisma que fundamentó tu iniciación, tu esotérico desarrollo, sus ideas 

hiciste de ciertos símbolos sacralidad, recuerdo imborrable de tu ser, de un saber inmaculado. Te llegan noticias entre el ruido de su arcana raíz, una vibratoria transmisión buscando expresión, una forma en el tejido que bordas de infinitas líneas  

lunes, 10 de febrero de 2025

Aire. Edvard Griegg

tu igual es toda una sinfonía decorando tu casa en todos sus pormenores, te habita a través de los amplios ventanales, te ve en el jardín con el agua de lluvia, pálido fondo de verde fundiéndose con el cielo. Es creador de paz

su aroma me sorprende a veces como música declarándose a los pájaros, un maestro de etéreas referencias

me embarga esa armonía buscona que los años pensaron, la durabilidad del encuentro, el sueño acompasado por sus vientos más dulces, la rústica ambientación sin perder un ápice de ilusión. Pongo empeño en esa unión natural, dejo de errar por un instante, comienzo un viaje de otro tipo, puedo echar nada de menos. Se ha hecho la vida concierto, un roce de corcheas amistosas, un saber originario 

es cierta tu nota recién salida de las aguas, la intimidad de ese paisaje sonoro nutriéndote de verdadero origen, tu médula espinal vibrando más allá de la montaña. Te da su amor llenándote el piano de notas, una amistad intransferible, todo deviene familiar. Excéntricas percepciones dan talento a tu animó, apadrinan tus composiciones y las envían allá donde reverberar 

trajo el verano regresos, un festejo personal al que todo acude, discretos jolgorios de puertas abiertas, el disfrute de largas caminatas por el tiempo. Conversan las tardes conmigo, se animan árboles y río, de belleza me colman los musicales brotes de las plantas en los rincones más lejanos. Restos de vida reposan en mis rocallas, una eterna inspiración

finalizo los viajes en aquellos tiempos que se estiran, de un  centro a alguna cultura antigua, del conocimiento al desconocimiento con amistosa humildad. Descubro himnos compuestos por jóvenes naciones indígenas, incluso su más fúnebre marcha en sus santuarios. Sin deseo, sólo escucha 

endurece el tiempo a veces sus diseños, edificantes pasiones llenas de entusiasmo. Dibuja a veces planos oblicuos con oscuros sótanos, cámaras de mortecina parálisis, relatos íntimos que nadie escribirá, kilómetros y kilómetros de aparente soledad

te ama la majestuosidad escénica que a pentagrama reduces, pequeños brotes de esa alegría que florecerán nostalgia, tú que defiendes esa excelencia silenciosa, que la eriges en musa de cada nuevo nacimiento 

van tus personas de paso entre tragedia y comedia, momentos que no mueren siendo la memoria tu cónyuge, una creativa brevedad que a todo te une. Me reúno con la vida tras ese nomadismo mental, verdadero hogar en realidad, y sigo reconociéndome en mis pasos por hacer del sueño algo hermoso. A orillas de mi casa las colinas 

tiendo a ensalzar el sentir vacío de animadversión, su parte musical que lo conserva, y valorarlo, que la canción del Sol alcance a la Luna con lírica batalla, su aureo impulso en lo dionisíaco apolíneo 

corretean mis sinfonías por estas grutas montañosas, hacen sus excursiones con unísona nota, suave suenan flotando con la placidez de la tierra, adquieren fuerza con el viento, se precipitan ladera abajo hasta alcanzarme en el valle. Visitan mi centro de pura vegetació, me acercan una comprensión que la vida volverá a fragmentar en ciclos, trocitos de hielo donde patinar poniendo a prueba mi equilibrio. Luego el verano devuelve una relativa fluidez 

me conjuro de nuevo contra el decaimiento, camino emprendo de la escuela un día más 

trato de escuchar al monstruo de la montaña, ese barítono con cuernos que emerge de las profundidades, hasta oír a sus duendes en los bosques, su chapoteo en el agua, su aleteo en el aire, el día. Esa bondad me tranquiliza 

defiende la tierra aquí su sentir con la música no escrita, la interpreto como a esposa primigenia, apasionada soprano de la más tradicional melodía, el pilar de mi creatividad, una efectiva similitud que merece mi reverencia, y a sus hechos apelo desnudándome de juicios 

tu origen te ve nacer día tras día y
morir en su olvido. Sí, laten recuerdos como estatuas de sal a orillas de tu casa, laguna estigia en que te sumerges por revivir emociones. Contemplas arcanos gestos con ojos dulces, y escondes tu verdadero rostro 

hay un barco repleto de almas que emprende su ruta de nuevo, un pasaje de mañanas componiendo futuras piezas, las venturas de futuras ambiciones que sólo el desinterés redimirá en el más bello canto. De nuevo navega por un valle de relucientes esmeraldas  junto a abruptos acantilados

el barco sale de mi pecho hacia lejanos fiordos de privilegiada belleza, montañas que juegan a las cartas con él, le hablan con suspirada música, odorífera lengua  

hace la piedra de pensativo pedestal, de siglos cogiendo estatura, de enfermedad y voluntad con regia actitud, de puertos donde reposar por un instante. Le perteneces 

es su aroma inequívoco, perfuma tus notas, advierte el aire su presencia, agudiza tus sentidos hasta una sobrecogedora cercanía, tiende a situarte como centro de esa emanación. Se hacen visibles las ánimas en algún puerto, te ofrecen su consuelo, apaciguan el salvaje río, que había enrojecido. La carne sana en todos sus pormenores 

sábado, 1 de febrero de 2025

Berkeley and Hume through the looking glass SIN FONÍA (de los avatares)

no me deja el humo ver con claridad, me llaman los años con su ciencia ocasional pretendiendo aplicarme sus métodos como un deber contraído, mis asuntos en una sopa de entretenidas hipótesis con apariencia de sistema, mis recursos experienciales estirando la lógica de mi psique. Conciben las impresiones corpúsculos como semilleros de ideas jugueteando con la gravedad. E intento ver patrón asociando y disociando a través del humo generado. Unifico en el tiempo tal basamento de columna sobre el aparente vacío, tan inhumano. Fabrico instrumentos desde ese supuesto. Qué vértigo!

mi empírico tanteo de lo real encierra su contradicción,  reformulo la forma con rigurosa obsesión por un conocimiento que se me escapa, mi humano escribiente replantea sus letras y números siguiendo un tema, juicios acometidos en pequeños alardes de coherencia, una autofagia fundamental. Me afirmo en la idea disociada de la materia, incluso de su origen, afirmo mi representación del mundo, que trato de embellecer. Luego, de cualquier saber me vacío 

voy dejando de ser crítico con ese humo velador, encuentro en la niebla momentos de ferviente admiración, ese trato, reveladoras lecturas de las figuras que esconde, sin graves conclusiones, empírico conductismo. Cada objeto me examina descubriéndome experiencias transhumanas que arramblan con los viejos y petrificados presupuestos, científica fé o religiosa: parecía tan sólida. Se agudiza un sentido común trasladado, no antropocéntrico, tan antiguo como mi universo, mi amor. Prevalece la existencia sin fuera y dentro, sin cadenas causales. Y late 

acordé contigo un razonamiento constructivo, establecer ideas que nos representaran, nos distinguieran de esta absoluta incoherencia, tan gratuita, este total desconocimiento

son humo los hechos, tratan de negar mi existencia, azuzan mi fé en un superior raciocinio que les de consistencia. Fui explicación, incluso convicción a falta de un origen cierto, humana apariencia y su opuesto en continua permuta 

me afirmo en la idea que creo conocer, las cosas van a su aire aún si las reduzco a objeto, me siento poseedor, una realidad cimentada 

la juvenil tendencia a la fuerza desatiende la observación, doctrinal se manifiesta como una verdad substancial con ínfulas de inmortalidad, una existencia razonada con poderosas demostraciones. Rechazas con espiritual materialismo lo improbable, extraño radar para lo inverosímil. Huyes la etiqueta moldeando tu discurso, cualquier dogmatismo con forma de cazamariposas, una constante de incertidumbre atravesando tu  esfera

me resumes en un juicio operacional, una mera sensación sin aduana de consecuencias, riguroso sistema nervioso, tu tiempo, inquieto proyector de insospechados efectos, giroscópico entre placer y sufrimiento, estirándose , contrayéndose como la propia mente, cada contradicción un juego dialéctico asumiendo que piensas, le das habla como extensión de tí mismo, experimentas límites, le das movimiento como algo distinto de tí 

quedas perplejo en tu diálogo entre escepticismo y apasionada creencia, te arrojas cachos de saber como agua fresca a tu rostro que acalle el debate resolviendo nada, te justificas por confirmar tu siguiente paso en el justo linde entre razón y experiencia. De repente, algo que no habías visto 

el error fundamenta tu elección, recreas la imagen sustanciosa con material empeño, un universo a medida que vas reconvirtiendo paso a paso, una ciencia inatacable. Causas error a imagen y semejanza de tí mismo, estás en la creencia más abstracta revalorizando su origen, una causa ulterior 

con culinaria consistencia te justificas considerando sistemas donde verter tus proposiciones con reseñable exclusividad, relacionando ideas en circuitos cerrados, silenciando los sentidos. Has desvinculado la impresión primera, el doloroso parto a la vida. E idealizas por construir tu lógica mientras caen gotas de sudor sobre tus aritméticas cifras, tus cálculos más precisos, bombea tu corazón el espacio y sus geométricos fragmentos, los resultados de un perfecto raciocinio, la más pura de tus ficciones 

me motivas con tu continua combinación de costumbres y rupturas, esa coexistencia de lo concreto y lo abstracto, ideas que surgen de ese todo

se ha dado cuenta el humo de su propia existencia en el hombre de propensión instintiva, le piensa materia con el alma del mundo, más real que la pura percepción, un acto de amor que no sabe de bien y mal, indemostrable, injustificable por vía racional. Te sabe sin análisis con una suficiencia desbordante, subraya un más allá de la razón. Y yo agrupo experiencias derivadas de un intercambio movedizo, un endiablado espíritu inmanente que rehuye tu observación y cuya causa desconozco. Añado hipótesis percepción tras percepción, todo un universo 

de la ilusión abstraigo generalidades como mejorados bastones, y sigo tomando la vida 

proceso mi agnosticismo como extendida balanza de contrapesos, si no hay un Yo nada pasa. Pongo a salvo periódicamente mis matemáticas como medida de saber, doy nuevo volumen a mis cuentas en el experimental raciocinio tras los hechos percibidos. Embellezco en lo posible la ilusión colectiva 

admite el querer la cosa externa por razón del autoconocimiento, de inferirir existencia a partir de los sentidos. Con qué se relacionan mis sueños? No descansa la mente en su continua fabricación, la continua vibración de mi sistema nervioso, la erupción de sus emociones. Y se pregunta a sí misma 

evidencio mente que experimenta cuestiones, calla en la escucha, tiene ante sí el nunca repleto de percepciones y ahí se realiza, refiere sus correlaciones con bendita fé fabricando sus objetos, hipoteca incluso la existencia privándose del todo, del nunca, con pétreos basamentos. Recurro a pequeñas varas de veracidad que den orden a mis sentidos, un pequeño círculo de certeza en lo imprevisible. Pone la mente su existencia en duda, el mundo apenas la encuentra pide pruebas, me cita ante los tratados de la naturaleza humana, partes, secciones, un escéptico respeto me objetiva como agnóstico diagnóstico negando mis sensaciones, el espíritu de mis cosas en mi panteísta voluntad. Me refiere a un mundo exterior que desconozco 

apunto al adversativo Aunque con material empeño, la negación que cree deshacer situaciones, la duda plausible o no fuera de mí, la posibilidad útil que produce lo concreto. La proposición causal me concede la materia como cuerpo confeso, un ello cercano en el que reconocerme, la incapacidad de comprender espíritu alguno, la mente productora 

deviene el escepticismo una forma de gnosis tras la agónica crítica, concluye capítulos enteros de Historia en un ahora incomprensible, evidencia mi propensión al instinto ancestral, sentido puro de existencia del que pende un mundo. Percibe mi percepción y nos miramos, somos, nos dotamos de una sensibilidad extraordinaria, un animal guiado por su fé en los objetos, cada uno un pensamiento y sus designios, la acción, el movimiento. Este universo me opina rebatiéndome sin cesar, me filosofa en constante enseñanza, da muestras de su inaccesible mente con las pobres imágenes que fabrico, canaliza esa frustración originaria en su expansión. Él me transporta siendo en una relación directa, me pone la mesa con todas las viandas, infinitas imágenes de un pozo sin fondo. Cuento a su dictado las evidencias que razono, su reflexión en cada duda que le refiero, mis cositas de la percepción y su ignota causa, los argumentos que quiero probar suscitando una posibilidades exterior, las diferencias que establezco, las semejanzas desde una energía individible, la sugestión de un amor impalpable capaz de desintegrarte. Allí está el hombre, calavera en mano, preguntándose por el ser desde los inicios del tiempo 

el pero no se detiene, carece su percepción de vigilia, de sueño, usa palabras como indicadores de un libro gigantesco, distingue entre ideas, órdenes celestes y terrenas llenando el ahora, hasta que no percibo un yo. Algún espíritu crea modos de existencia, mente absoluta que te desconoce. Tu yo subsiste en uno de esos modos, mortal en la mente, la posibilidad de ver y tocar, sentir desde cada pensamiento concebido, una sensibilidad patológica 

mi yo es una invisible propiedad de millones de años de evolución, una formación imaginaria donde creo guardar mis pasiones. Llega a hacerse calcárea las más de las veces, por repetición básicamente, le afectan las formas. Voluntad y pasión se acercan como quien no quiere la cosa, el delirio racional frente al irracional obedeciendo a ciclos desconocidos, la libertad en una aparente espontaneidad. Me ausento a veces de la coacción mundana en ese breve gesto, un acto de encuentro con la mismidad sin más motivo que inmanencia, aire. El siempre me halla en el ahora, un nunca riguroso que la razón no acepta, esclava del tiempo. La intensidad de esa lucha determina caos y orden, su oscilante armonía 

me distinguen las ideas con sus imaginativas conexiones, alteran mi voluntad sujetando mis modos, me siguen con sus pertinaces ojos a plena luz del día, me eligen qué ver, determinan los objetos de mi entorno en variadas concreciones, vuelcan mi vista y mi oído sobre sentidos sucesos, sellan mi voluntad con creativas estampitas, me hace Otredad. Ellas, vivarachas, clarifican la imaginación en secuencias estables, un aspecto coherente, me justifican, y hasta me aplauden como un alarde de sabiduría, me recuerdan la verdadera autoría con benévola desautorización. Los métodos suscitan pertenencias, nombres, leyes que aprender desde cada experiencia individual. Nos enseñamos en el curso ordinario de los días, la razón nos explica su propia agrupación en reglas entendibles

respeto cada asociación causal, no  revuelvo en sus papeles mnemotécnicos, posibilito esa cadena sucesoria de causas y efectos mientras estoy en el tiempo, los escenarios narrados de pasiones e impresiones que cada relato mitifica, Yoes cumpliendo su función, sentidos y contradirecciones llamándose memoria, fabricando identidades con biográfica ciencia, extendiendo ideas como sábanas al viento que se llenarán de circunstancias, de acciones a olvidar. Me preguntan los pensamientos por evidencias que también olvidaré, por los fenómenos que fechar 

y resumo existencias en infinita soledad, espíritus del sueño libres de coherencias, un mundo incorpóreo

busca la memoria semejanzas, está el ahora percibiendo distinciones, el escenario del yo y su función asimilados, sigue lugares que el tiempo ordena, cronifica similaritudes, oculta lugares con numérica precisión, y hasta confunde intencionada particularidades de esas percepciones. Confundo particularidades por descubrir ideas, las personas que la memoria endereza en tiempos diferentes, en  escenarios que un Yo observador recrea

es mi fenomenismo una hercúlea representación sin término, evolucionado desde un matemático empirismo que voy perfeccionando, una ortografía esencial que pone remedio a cada estancamiento 

existo naturaleza como verbo claro sin expresión 

los brillos resultan de una metódica aplicación del dolor, acientífica experiencia que mueve lo visible transformándolo, una labor significativa a la que quizás demos título, los temas de futuros raciocinios de lo moderado a lo experimental. Investigo mi propio entendimiento en insaciable búsqueda fijando los límites aceptables para el grupo, su capacidad de conocimiento.  Instrumento análisis tras los Ahoras 

conlleva la pureza de ser una generosidad ilimitada, da las ideas sin sujeto reconocible, y haré sus copias separando y ordenando con vertiginosa imaginación. El Luego recompone a su gusto vinculando principios y finales, asociando impensables relaciones: semejanza, continuidad, causalidad. Tiendo a recrear impresiones ya acaecidas, suelo asociarme a lugares amados, a inferir de allí patrones de causa-efecto con lúdico fundamento 

he cuantificado tipologías como forma de saber, he distinguido con matemática lógica ciertos pensamientos sin más referencia que el vacío, he generado máximas que enjuicio necesarias para derruir contradicciones, síntesis a partir de hechos. Todo lo guardo en una pequeña neurona que creo escondida 

según el Yo afirma con sutil gracia, surge su contrario en un hecho, una experiencia que aboga en su contra, el juego de cuestión y respuesta: ¿quién soy?, soy?, sin importar un ápice el orden de los factores. Toda evidencia se nubla en ese torbellino, esa cruda confusión entre lo que percibo y lo que siento. Cuál la impresión que me origina? Hablamos con infinitas entidades usando físicas referencias, una cosmológica constante acompañándonos la vida, una permanencia infranqueable. Y buscamos emisores ahí fuera, nuevas identidades que absorber, que defender, sentirse vivo. Ponemos mojón nuevo en algún camino, un signo de existencia. Sucede el tiempo dolor, tristeza, placer, alegría, temor en una línea inacabable de la que un yo se apropia, y deriva 

conocimiento de hecho es previo al tiempo, lo contiene, lo sobrepasa, su verdad es transracional, metapsicologica, carece de expresión. En cuanto señalas, desaparece. Tus dedos solo pueden ficcionar el dibujo más sublime 

te tengo en cuenta, querido, te ideo analizando tu ahora con la identidad elegida, la persona del verbo que me convenga. Me averigua esa realidad tus capacidades que defender, tu existencia afirmándose como momentáneo yo y su diálogo filosófico, tu necesidad de pruebas desde la intuición descubridora, tus invariables variaciones con absurda certeza duda tras duda 

me aplico criterio con estricto sentido, hechos que me impresionen hasta el límite aceptado, actualizo su pasado ahora, predigo hacia el vacío. Habla la vida con productiva certeza, si llueve floreceré, me da la posibilidad de nexos en un supuesto tiempo, e imagino 

incesante concibe el alma substancias que nuestra percepción pueda soportar, concibe yoes que acompañen esos soportes, identidades que permanezcan entre nosotros por justificar el tiempo 

el pasado me observa en su constante selección de fenómenos, su ordenada sucesión, su relativa necesidad de cosas y experiencias por anticiparme a la vida, vieja costumbre

mi crítica la lleva el viento a confrontar temperaturas, a negarse a sí misma insustancialmente, fenomenal espíritu de la negación como reafirmación 

es tan movediza la base de mis inferencias, se tambalean las causas establecidas, se va la corriente en la casa, un fallo eléctrico incomprobable. He de suponer una unión constante sin sujeto que produzca objeto, el hábito de motivarme desde una conexión asumida sin conocer la causa. Me acostumbré a este a posteriori que ensambla impresiones, a transformarlas en algo que semeja pensamientos, una relación de sucesos que elevaré a N con valor ontológico. Hoy me he inclinado hacia un lado con recurrente obediencia, instinto de especie por dejar un rato el intelecto en casa

carezco a veces de sustancia, el Yo
deja de captar realidad seco de impresiones, se han ido las ideas de vacaciones (probable aleteo en algún punto ignoto del cosmos), y constante vibratoria se hace cargo del Entonces. Mis conjuntos imaginativos respiran para nuevos fundamentos con aparente cohesión tras la dicha perceptiva. Hoy es principio, y todo parece  sólido, estable, aún si al fondo aparecen algunos hilillos de humo 

miércoles, 8 de enero de 2025

PicOdes XVII

   far west sunset

   the lost Chinese lantern

   the view

   ooops, wrong planet

   the mechanicl heart

  the mountain the abstract painting

   signals

   wood and ivy everlasting gab

   the snazzy cocoon

   the spiritual watch

   the blind creature

   touching stars and visions

   family (uncle ,aunt...?)

   towards heaven

   cave detail

   paths

   overflowing

   presence

   shacking up

   leaves and chair

   Time jamming

   circuits

   thermodynamicd

   when rolling on the threshing             ground

   amongst the rye

   night fruits

   the primitive eye

   color signals

   trunk monster

   invaded

   branches love in the sunset

   the ivory tower

   peculiar lungs system

   looking at you

   fierce overgrowth

   under strange moons

   footsteps

   another quantum shift?

   my hands

   moon base 3

   bones exhibition

   dentition abrading

   neural fireworks

   inside and outside

   looking for

   goblins' land

   strange flowers

   my friend Longlegs

   elytrons flower